PAMPLONa - El excontable Tomás López volvió al puesto de trabajo con la salida de la junta directiva que presidía Archanco y la llegada de la comisión gestora que encabezó Javier Zabaleta, y comprobó que había nuevamente una cantidad aproximada de 1,5 millones de euros sin justificar. "La junta gestora se reúne con Vizcay, Ardanaz y los auditores. Yo en esa reunión no estoy. Después, me entrega el señor Vizcay unas facturas", dijo sobre los documentos de Flefield. Eran unas facturas por trabajos de scouting -visionado de jugadores de otros clubes para posibles fichaje- supuestamente realizados por esa empresa de Madeira. "Era extraño aquello. Después de la reunión con la gestora le debieron dar la orden al señor Vizcay de que había que subsanar esa situación y aparecieron esas facturas", indicó. Sin embargo, ha dicho que él "no estaba dispuesto a volver al club tras la baja y a que me complicasen la vida", por lo que elaboró un documento en el que "exigía al gerente del club que me diera la orden por escrito de que yo tenía que contabilizar las facturas y las salidas de caja por esas facturas". "Una vez firmada la orden, se las entregué al señor Ardanaz y se las llevó al auditor", apuntó. Luego, el auditor pidió un contrato, que "se lo mandó Vizcay desde su ordenador, del que yo no tenía contraseña". - E.C./J.L.