En una rápida búsqueda en Google después del partido contra el Atlético, si ponías "Sergio Herrera", lo primero que salía al teclear era la palabra "cláusula". Normal. Con el partido que se marcó ayer el portero rojillo muchos buscaron su precio de salida. Un encuentro como el del Metropolitano pone en el escaparate a muchos y en el Club deben saber ser firmes de cara al verano.

Y es que un partido en el que se estaba jugando la Liga, Herrera le quitó el protagonismo a todos para volver a lanzar su nombre al panorama. Cualquiera que haya visto los partidos de Sergio esta temporada se sorprendería poco de su nivel en Madrid, pero estos enfrentamientos tienen mucha prensa y mucho espectador casual que de normal no ve a Osasuna. Eso abre unos escaparates poco habituales para un jugador.

El portero de Osasuna no es que se pusiera en el candelero, es que además apuntó a los focos sobre él. Más allá de los dos goles rojiblancos al final del encuentro ante los que no pudo hacer nada, Herrera comienza a tener un nombre importante en la competición y ahora es el club el que debe valorar, como hizo Arrasate al acabar el encuentro, la importancia de tener un portero de su nivel. Y es que hablan las malas lenguas que van a venir varios equipos a presentar ofertas por el de Miranda de Ebro. Entonces será cuando se vea si las palabras del Club en boca de su director general se cumplen. "Osasuna no vende por debajo de su cláusula a ningún jugador". Ojalá, Sergio es necesario para el crecimiento del equipo la temporada que viene. Y si viene una oferta irrechazable para el jugador, que nunca se sabe, la entidad tendrá que conseguir los recursos para sustituirle y eso pasa por el pago de la cláusula (11 millones y medio).

Otro que se puso en el escaparate fue Ante Budimir. Otra vez. Le llegó una y la metió para adentro. Tener un delantero de ese estilo (dos si recupera el Chimy el nivel) es oro. El oro, ahora mismo, se cotiza en ocho millones. No tiene pinta que con las últimas exhibiciones el Mallorca quiera bajarle un euro a su opción de compra pese a que, hay que recordar, el croata no salió nada bien de la isla. Y todo esto con una Eurocopa en ciernes. En los despachos rojillos tienen trabajo que hacer. Como dijo Arrasate, tener un portero y un delantero de este nivel es la vida para un equipo como Osasuna. Y los dos están en el escaparate.