La defensa de Osasuna no atraviesa sus mejores momentos y en el encuentro de ayer volvió a quedar retratada en algunas acciones y, fundamentalmente, en el gol del Girona. Ramalho fue el futbolista que se quedó descolgado para que Juncá se aprovechara de una diagonal lanzada por Juanpe, controlar y marcar ante la salida de Juan Pérez. Ramalho, además, regresó a Girona para enfrentarse a su exequipo, en el que ha militado siete temporadas. El lateral de Barakaldo estuvo al nivel del equipo y no firmó una buena actuación. En la imagen, Ramalho y Unai García intercambian impresiones después del gol del conjunto local.