- Ante Budimir acudió ayer a su cita con el gol y marcó por cuarta jornada consecutiva, convirtiéndose en el sexto jugador de la historia de Osasuna que lo consigue en Primera División y situándose a un partido de igualar el récord del Chengue Morales, que anotó en cinco jornadas consecutivas en la temporada 2004-2005.

La racha del delantero croata, que acumula seis goles en la Liga y otro en la Copa (números calcados a los del Chimy Ávila, junto al que encabeza la lista de mejores artilleros del conjunto navarro en el presente ejercicio) comenzó en la jornada 29, cuando anotó el segundo tanto de la victoria de Osasuna contra el Levante en El Sadar (el 2-0 de un choque que acabó 3-1). Siguió en la 30 con el tanto que le hizo al Betis en Sevilla, que sólo sirvió para maquillar la derrota de su equipo (fue el 2-1 de un duelo que terminó 4-1), se alargó en la 31 con una postrera diana que permitió al equipo de Arrasate derrotar al Alavés en Pamplona (1-0) y ayer vivió un nuevo episodio en la 32 con un soberbio cabezazo a un no menos excepcional centro de Rubén García (el 0-2 de un encuentro que concluyó 1-2).

Con el gol de ayer, Budimir superó su propia mejor racha como rojillo (el curso pasado anotó sucesivamente en las jornadas 35, 36 -doblete- y 37) e igualó con otros cuatro futbolistas de Osasuna que marcaron en cuatro jornadas consecutivas en Primera División: Julián Vergara (en las jornadas 9, 10, 11 y 12 de la campaña 1935-1936), Sabino Andonegui (en las jornadas 26, 27 -doblete-, 28 y 29 de la temporada 1953-1954), Patxi Iriguíbel (en las jornadas 6, 7, 8 y 9 del curso 1980-1981) y Roberto Torres (en las jornadas 6, 7, 8 y 9 del ejercicio 2016-2017).

El atacante croata apunta ahora al récord histórico del club, en poder del Chengue Morales. Y es que el uruguayo marcó en cinco jornadas consecutivas (entre la 11 y la 15, ambas incluidas) en la temporada 2004-2005, registro que puede igualar el próximo miércoles contra el Real Madrid en El Sadar.

Budimir señaló al término del choque sentirse “súper contento” por marcar porque “no hay nada mejor que meter goles y quedarte con los puntos” y destacó “la ambición y el carácter del equipo ante un rival directo por un puesto alto y no por la permanencia”.