El entrenador de Osasuna, Jagoba Arrasate, desveló ayer los planes del equipo cuando la competición se detenga por la disputa del Mundial de Qatar: “Vamos a descansar una semana y media o así y luego tenemos previsto, aunque no lo tenemos cerrado, irnos cuatro o cinco días fuera para jugar dos o tres partidos”.

Esa es la idea que tiene en mente el técnico rojillo, aunque, desgranada y poniendo fechas a lo que adelantó ayer el vizcaíno, consistirá en unas vacaciones que comenzarán justo después del partido de Copa del próximo sábado a las 16.00 horas en el campo del Fuentes de la Regional aragonesa. Es decir, los jugadores del conjunto navarro que no acudan al Mundial –Budimir conoce mañana miércoles si entra en la lista definitiva de Croacia y Abde también está pendiente de si le incluyen en la de Marruecos– comenzarán sus vacaciones el domingo 13 de noviembre, para retomar el trabajo en Tajonar unos diez días después, es decir, alrededor del 23 de noviembre.

La primera fase de esta segunda pretemporada se desarrollará en las instalaciones de Tajonar durante al menos un par de semanas, para después salir de Pamplona durante algo menos de una semana a principios de diciembre para disputar tres partidos amistosos. Descartado un viaje largo al extranjero, ya que se llegó a especular con la posibilidad de un desplazamiento a Estados Unidos, el plan que manejan en Osasuna, aunque todavía sin cerrar, es el de una concentración en el sur de la península, en busca del mejor clima posible y de la posibilidad de enfrentarse con alguno de los equipos extranjeros, sobre todo británicos, que tienen previsto venir a España durante el parón.