Osasuna no contempla en su radio de acción para lo que queda de mercado de fichajes la llegada de Abde y, probablemente, tampoco la de cualquier otro futbolista que refuerce el equipo. El exjugador rojillo la pasada tempora, ahora en la filas del primer equipo del Barcelona, atraviesa un momento difícil a las órdenes de Xavi porque no acaba de entrar en sus planes a pesar de que fue confirmado como un hombre importante.

En esta situación, la salida de Abde es otra de las opciones con las que se especula y el retorno al conjunto navarro, una de las opciones con la que desde medios de Barcelona se especulaba. Osasuna, sin embargo, tiene claro que Abde es un futbolista imposible porque su cotización en estos momentos no tiene nada que ver con la que permitió en el pasado curso, hace un año, que llegara a Pamplona.

El Bayer Leverkusen está dispuesto a pagar 20 millones de euros por hacerse con sus servicios y, en esta tesitura, el conjunto blaugrana estaría dispuesto a permitir su salida por diez millones reservándose el 50% de la propiedad. Cifras mareantes para un club como el rojillo que solo puede aspirar a una cesión.

Osasuna, de hecho, no espera que haya más entradas y, por contra, está más preocupado de que alguna oferta de última hora de alguna Liga pujante –la Liga de Arabia Saudí– pudiera interferir en su tranquilidad con la salida de algún futbolista del equipo.