La plantilla del primer equipo de Osasuna retomó ayer el trabajo en Tajonar tras dos días de descanso y lo hizo con la única baja por lesión de Darko y las ausencias de los internacionales David García y Ante Budimir, concentrados respectivamente con las selecciones absolutas de España y Croacia, así como la de Jagoba Arrasate, que se desplazó hasta Las Rozas (Madrid) para participar en un par de reuniones, una matinal del Comité de Entrenadores de la Real Federación de Fútbol (RFEF), es decir, entre técnicos de Primera y Segunda División, y otra de este mismo colectivo con representantes del Comité Técnico de Árbitros (CTA) de la RFEF, entre los que se encontraban su presidente, Luis Medina Cantalejo, y los navarros Alberto Undiano Mallenco y Eduardo Prieto Iglesias.

El Comité de Entrenadores, que recientemente eligió a Arrasate como mejor técnico de Primera División del curso pasado, se reunió ayer al mediodía (12.00 horas) con la siguiente agenda oficial: Memoria de actividades de la temporada 22-23 y líneas de mejora para el colectivo y nuevos proyectos. Uno de los asuntos del que se quejaron algunos entrenadores fue la tardanza a la hora de cobrar sus finiquitos cuando son despedidos.

Aprovechando el desplazamiento masivo, el presidente del CTA, Luis Medina Cantalejo, convocó a los técnicos a otra reunión, también en Las Rozas (Madrid), con el objetivo de resolver las dudas de estos sobre los criterios arbitrales y también para escuchar sus quejas, como la que no hace mucho expuso Arrasate sobre la limitación de la libertad de expresión que sufren los entrenadores y el diferente trato que dispensan algunos colegiados a los técnicos.

Bittor Alkiza, en Tajonar. Oskar Montero

El italiano Carlo Ancelotti (Real Madrid) y el argentino Diego Pablo Simeone (Atlético) alegaron diferentes compromisos para no asistir a la reunión con los árbitros, de la que Rubén Albés, preparador del Albacete, hizo un resumen: “Se ha hablado un poco de todas las cosas. De la protección del entrenador, de su figura, de la relación con los árbitros, de cómo están destinados todos los presupuestos para hacer crecer, para empujar cada día a ser mejores entrenadores y también que se cuide nuestra figura dentro del fútbol”.

“Simplemente buscamos mejorar la comunicación entre las dos partes, entendernos, que haya empatía y eso fue el objetivo. Hay cosas que queremos mejorar y seguro que las conseguiremos”, añadió Albés.

En ausencia de Arrasate, su segundo, Bittor Alkiza, llevó la voz cantante en la sesión de ayer en Tajonar.