Portería a cero fuera 10 partidos después

Consiguió Osasuna el pasado lunes en Oviedo un punto lejos de El Sadar, algo que, hasta la fecha y con Alessio Lisci en el banquillo, el conjunto navarro no había sido capaz de lograr como visitante. Pero no queda ahí la cosa, pues los rojillos sumaron merced a un empate sin goles, por lo que también rompieron una racha negativa de diez partidos consecutivos de Liga fuera de casa encajando.

Hasta antes de jugar en el Carlos Tartiere, Osasuna había recibido gol en sus cinco primeros desplazamientos del campeonato de la regularidad. De hecho, había perdido en el Santiago Bernabéu con el Real Madrid (1-0), en el RCDE Stadium contra el Espanyol (1-0), en La Cerámica con el Villarreal (2-1), en La Cartuja de Sevilla contra el Betis (2-0) y en el Metropolitano con el Atlético de Madrid (1-0). Pero es que la mala racha de recibir goles como visitante había comenzado el curso anterior con Vicente Moreno como entrenador.

Osasuna terminó la temporada pasada con un empate en Mendizorroza contra el Alavés (1-1), resultado que le privó de clasificarse para una competición europea, pero antes también encajó en sus visitas al Betis (1-1), al Villarreal (4-2), al Valladolid (2-3) y al Leganés (1-1).

Para encontrar el último partido de Liga del conjunto navarro con su portería a cero lejos de El Sadar hasta antes del 0-0 del pasado lunes en Oviedo, hay que remontarse hasta el 30 de marzo de este mismo año, cuando en un duelo correspondiente a la jornada 29, los rojillos empataron sin goles en San Mamés contra el Athletic, en un duelo en el que Vicente Moreno llegaba con el agua al cuello después de perder en casa con el Getafe (1-2) y salir goleado del Lluís Companys por el Barcelona (3-0).

El hecho de que haya pasado tanto tiempo entre las dos últimas porterías a cero de Osasuna en Liga lejos de El Sadar, demuestra de la dificultad que entraña competir en la máxima categoría, aunque también habla bien a las claras de la debilidad rojilla como visitante en los últimos tiempos, una prueba de que el cuadro navarro necesita mejorar lejos de El Sadar para poder disfrutar de una posición clasificatoria más desahogada que la actual. Y es que Osasuna se encuentra ahora mismo con únicamente dos puntos de renta con la zona de descenso y este próximo sábado vuelve a jugar a domicilio. Lo hace a partir de las 16.15 horas contra un Sevilla que va algo mejor, pero tampoco demasiado, ya que sólo está un par de puntos por encima de los rojillos.

Ha tenido que esperar mucho Osasuna para dejar su portería a cero lejos de casa, pero contando únicamente los partidos de Liga, pues, en la primera eliminatoria de la presente edición de la Copa, el equipo de Alessio Lisci goleó hace apenas una semana en Palma al Sant Jordi mallorquín sin encajar (0-5), aunque teniendo en cuenta que lo hizo contra un rival de cinco categorías menos. El lunes repitió en Liga contra un recién ascendido en puestos de descenso. Ahora debe subir el nivel.