Osasuna dispone de muy poco tiempo para preparar su penúltimo partido de Liga del año , el que este próximo sábado le va a llevar hasta la Ciudad Condal para enfrentarse con el líder de Primera División, un Barcelona que ha ganado sus últimos seis compromisos ligueros, es decir, todos los que ha disputado desde que cayera contra el Real Madrid en el Santiago Bernabéu (2-1). Y para tan trascendental choque, el entrenador del conjunto navarro, Alessio Lisci, va a poder contar otra vez con la totalidad de los integrantes de la primera plantilla, a excepción del lesionado Iker Benito, y con la duda otra vez de Kike Barja.
Pese a que fueron unos cuantos los jugadores de Osasuna que pidieron el cambio durante el partido que el pasado lunes sirvió para que los rojillos volvieran a ganar tras más de dos meses sin hacerlo (2-0 al Levante en El Sadar), lo cierto es que Lisci confía en contar con todos ellos para el choque en el Spotify Camp Nou. Porque lo de Lucas Torró parece que se ha quedado en un golpe, lo de Aimar Oroz en unos calambres y lo de Iñigo Arguibide, que tiene sus opciones para repetir como titular con permiso del recién reuperado Valentin Rosier, ya dijo el míster que fue una cuestión de cansancio, porque no es lo mismo competir en Primera RFEF que en Primera División.
Con el que también espera contar Lisci es con Enzo Boyomo, con la rodilla algo inflamada, pero en vías de estar mejor conforme se vaya acercando el día y la hora del partido contra el Barça.
En cualquier caso, entre que a Osasuna le tocó cerrar la última jornada, es decir, que tuvo que jugar el lunes, y que la plantilla dispuso ayer miércoles de una jornada de asueto, lo cierto es que la preparación de la visita al líder se va reducir a la sesión del pasado martes, a la que va a completar hoy jueves el equipo sin testigos, o sea, a puerta cerrada, y la de que mañana viernes antes de volar a Barcelona.
Osasuna cerrará después el año visitando al Huesca, de Segunda Division, en Copa, para después recibir al Alavés en El Sadar en el último partido de los rojillos de un años 2025 que termina con más sombras que luces, aunque existe un pequeño margen para cambiar esta dinámica sumando más puntos y otra ronda más en el torneo del KO.