pamplona. Ambos colectivos han mostrado su preocupación por el antecedente que la salida a concurso de la gestión del servicio puede suponer de cara a privatizar en el futuro más servicios de otras bibliotecas y niegan que el carácter de urgencia justifique la operación.
Por parte de Asnabi, su presidente, Iñaki Suso, explicó que "hay una lista de sustituciones que funciona de forma inmediata" y en la que el personal entra a formar parte de la plantilla como interino hasta que convoca una Oferta Pública de Empleo para cubrir las vacantes.
Asnabi ha denunciado igualmente que el pliego de condiciones de la nueva biblioteca da un plazo de dos semanas para catalogar y clasificar 14.000 ejemplares para que estén disponibles en el momento de la apertura, un trabajo que consideran "imposible" de realizar en ese tiempo. Por este motivo, se ha asignado este trabajo a dos becarias que trabajan en la Biblioteca de Navarra, en Mendebaldea, para que avancen en esta labor. "El propio Gobierno de Navarra le está haciendo el trabajo a la empresa privada", denunció Suso.
La gestión pública del servicio era también una de las reivindicaciones de los vecinos del Casco Antiguo desde que constituyeron el Grupo de trabajo por una biblioteca digna para canalizar las propuestas vecinales en torno a la nueva y reivindicar el carácter de centralidad que, por la ubicación de la biblioteca, entienden que esta debería tener. Desde la plataforma señalaban ayer que van a convocar más protestas, esta vez junto a Asnabi, y recordaron que tanto el Parlamento de Navarra a través de una resolución, como el Ayuntamiento de Pamplona en diversos plenos, se han pronunciado a favor de una biblioteca con "carácter de centralidad", al contrario de lo que finalmente va a suceder.
La desiderata o documento con las peticiones y propuesta que la plataforma vecinal dio a conocer a las autoridades cifraba en unos 25.000 los fondos necesarios dados los usuarios potenciales de la nueva biblioteca de San Francisco, y pedían al menos tres trabajadores para esta.
El pliego de condiciones que salió a concurso el pasado 11 de octubre, establece sin embargo una obligatoriedad de solo dos empleados. En las restantes bibliotecas de Pamplona, según Asnabi -a excepción de las de San Jorge, Milagrosa y Etxabakoitz, con dos y un bibliotecario, respectivamente- trabajan tres personas, incluso cuatro en el caso de Yamaguchi.
La biblioteca abrirá al público en noviembre tras quince meses clausurada para acometer las obras de remodelación. Los últimos preparativos corren a cargo estos días de los trabajadores del programa de Empleo Social Protegido, que están reparando el forjado de ventanas y puertas del edificio de la Agrícola.
denuncia de bildu El grupo municipal de Bildu denunció ayer "la falta de respeto de UPN a la voluntad del pleno del Ayuntamiento de Iruñea así como de las vecinas y los vecinos del Casco Viejo sobre el modelo de gestión para la nueva biblioteca de San Francisco". Igualmente criticó que el Gobierno de Navarra no haya cumplido con el convenio de bibliotecas "con la excusa de la crisis económica" ya que es a este a quien corresponde "asumir económicamente el coste del personal de las bibliotecas de la ciudad".