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"Nos gustaría seguir con la tienda, ya que para nosotros es una casa emblemática"

El de estafeta 1 fue cerería y confitería en el siglo XVIII y hoy mantiene el negocio de baños de los guerendiáin

pamplona. "Nos gustaría seguir manteniendo el negocio a toda costa y darle continuidad; para nosotros es una casa emblemática y sería una pena perderla". Pío Guerendiáin, conocido por su faceta como fotógrafo, es el único arrendatario que queda en el edificio de la curva de Mercaderes, y espera poder optar al mismo "pero los precios son altísimos", dice, aunque confía en poder acogerse al derecho de tanteo y retracto al ser arrendatario.

Guerendiáin, que hoy todavía sigue asomándose a la mirilla de su tienda todos los Encierros, como viene haciendo con su cámara desde 1963, recuerda que "en 1750 el edificio fue donado por un particular al Hospital de la Beneficencia, que era una entidad caritativa", y que sus antepasados lo arrendaron ya en 1754: "Eran maestros cereros y confiteros. Yo tengo los libros de mi tatarabuelo Miguel Guerendiáin de Tiebas, que tuvo que pasar un examen para dedicarse a esa actividad. Las ceras y las velas, en aquella época, tenían mucha importancia, porque con las velas se iluminaban las casas. Pero además, de los panales de cera sacaban la miel y de ella elaboraban las confituras, de ahí que fueran cereros y confiteros". Ya desde entonces, el negocio se llamaba Guerendiáin, como hoy en día, aunque hoy es una tienda de sanitarios y muebles de baño. De Miguel Guerendiáin "pasó a Lorenzo; a Alejo, a Tiburcio mi abuelo, que montó el negocio de materiales de construcción; a Pablo mi padre; a Pío, mi tío, y mi primo José Joaquín; luego lo llevé yo, y ahora mi sobrino Juan".

¿Qué pasa con esa casa que no se vende? Guerendiáin opina que "piden unos precios que no están en el mercado. Es un edificio que no vale, porque hay que tirarlo y volverlo a hacer". Él vivió en esta casa hasta los 5 años, y se ha asomado al balcón durante 50 años: "Tengo fotografías del Encierro desde el año 63, cuando comencé con las fotos", porque "para mí es la mejor casa en el Encierro de Pamplona".