El recinto de la Ciudadela prevé reabrir sus puertas el miércoles 23 de julio, una vez concluidas las labores de limpieza y escarificación que se realizan tras las fiestas. Estos días se dedican a retirar los restos pirotécnicos caídos durante el lanzamiento de los fuegos artificiales, tanto en la parte alta de las murallas como en los fosos, por la celebración del ‘XXIV Concurso Internacional de Fuegos Artificiales San Fermín. Fuegos de autor’, así como parte de las infraestructuras instaladas para el disparo de las colecciones.

Una brigada de hasta 8 personas limpia el interior del recinto amurallado, mientras otros 18 operarios se distribuyen por los fosos, para ir despejando el área comprendida entre la estación de autobuses y el edificio Singular. Los trabajadores pertenecen a los servicios municipales de limpieza y de jardines. En total, recuperan un área de cinco hectáreas, divididas en tres de los fosos y dos de la parte alta de las murallas.

Una operaria trabaja con una máquina sopladora. cedida

Los trabajos se dividen en dos fases: primero, una limpieza manual para recoger restos, como carcasas o petardos, y material que haya quedado sin explotar; después, se procede a la escarificación. Con estos trabajos, que consisten en realizar una incisión profunda en el suelo para que los brotes situados en la parte más alejada de la superficie no tengan impedimento a la hora de volver a desarrollarse, se prevé retirar entre 60 y 80 metros cúbicos de restos vegetales con trazas de fracción de pirotécnicos.

Visto bueno de Seguridad Ciudadana

Una vez concluyan los trabajos y Seguridad Ciudadana confirme que no quedan restos pirotécnicos, reabre la Ciudadela y se vuelven a ofrecer al público las cuatro salas de exposiciones (Mixtos, Sala de Armas, Horno y Polvorín), con los horarios habituales: de martes a viernes, de 18:30 a 21 horas; sábados, de 12 a 14 horas y de 18:30 a 21 horas; y domingos y festivos, de 12 a 14 horas.