Un ‘skate park’ de competición

“Es el único skate park céntrico. Está siempre lleno y no cuenta con el mantenimiento necesario. Lo disfrutamos porque llevamos toda la vida patinando aquí, pero no nos sentimos seguros haciéndolo”, sentencia Daniel González Longás. Skater, él y sus compañeros reivindican al Ayuntamiento de Pamplona un “lavado de cara” de la pista de skate de Antoniutti: “Tiene una vida de alrededor de veinte años, y lo único que han hecho es darle capas de pintura muy a menudo para borrar los grafitis; pero esto estropea las rampas”.

Entre todos los skate park de Pamplona y su comarca, a la mayor parte de los skaters es este el que más les gusta por ser el más completo: “Además de estar en el centro de la ciudad, tiene rampas, cajón, espacio para hacer flat (patinaje en el suelo) y barandillas. En ningún otro tienes todo esto”. Por ello, están “molestos e inquietos”. La velocidad que alcanzan es “incompatible” con los agujeros y grietas que se han formado: “Sufrimos cada vez que pasamos por un agujero o vemos a alguien hacerlo. Las caídas pueden ser muy peligrosas, además de que las ruedas y los materiales también se estropean”.

Al igual que Daniel, “desde hace años” son “muchas” las personas que se han visto afectadas: “Se han puesto quejas y se han mando instancias al Ayuntamiento, y hasta ahora no nos han escuchado ni ayudado”. Presupuestado en “unos 10.000 euros”, el Consistorio ha aceptado el proyecto de reforma de uno de los amigos de Daniel: “Sabemos que ha entrado en los presupuestos de este año, pero no han anunciado que tengan intenciones de empezar. Además, tienen entre manos otro proyecto de pump track de más de 200.000 euros”.

El diseño del skate park de Antoniutti contemplaba las competiciones a largo plazo, otra de las razones por las que piden al Consistorio que dé “un paso al frente”: “El patín se mueve en muchas ciudades, cada vez atrae a más gente. También acaba de entrar en juego el skate olímpico, tenemos que aprovecharlo. Tener esta pista en buenas condiciones nos beneficiaría”. De hecho, en Pamplona animan a los más pequeños a probarlo para que después lo practiquen si les gusta: “Hicieron un skate park cubierto en Noáin. Damos clase allá. Es un deporte más y queremos darlo a conocer”. Asimismo, hace cuatro meses crearon un club, donde trabajan desde entonces en futuros proyectos para fomentar la actividad.

piedras en la pista Los skaters de Antoniutti denuncian también el peligro que suponen las piedras del parque infantil que caen sobre la pista: “Hay veces que los padres no están atentos a los niños. A veces juegan a tirar piedras con las que podemos tropezar y caer, al igual que con los agujeros de las rampas”, concluye Daniel.