pamplona- El Ayuntamiento de Pamplona dedicará una calle a María Camino Oscoz Urriza, una maestra asesinada en Navarra tras el golpe de Estado de 1936. Así lo expresó ayer el Consistorio en una nota en la que anunciaba que el alcalde, Joseba Asiron, había firmado esa mañana la resolución por la que se aprueba el nombramiento de la calle. Propuesta por el grupo Nombrar Mujeres, la nueva calle pretende que “la ciudadanía conozca y reconozca su labor como pionera en la lucha por la igualdad y defensora de unos valores que le costaron la vida”, afirmaron.

La vía transcurrirá entre las calles Tajonar y Valle de Egüés y, de forma paralela, entre las calles Isabel Garbayo Ayala y María Lacunza.

María Camino Oscoz Urriza nació en Pamplona, en el número 29 de la calle Santo Domingo, el 11 de abril de 1910. Sus padres, Antonio Oscoz y Anastasia Urriza, fallecieron cuando apenas era una niña a causa de la gripe de 1918. Tras esto, ella, un hermano y dos hermanas fueron repartidos entre los familiares. Cursó sus estudios en el colegio de las Teresianas de la calle Mayor y logró terminar los estudios de Magisterio durante la década de 1920. En 1930 trabajó como maestra en el pueblo de Güesa, en el Valle de Salazar.

Su participación y afiliación con los movimientos y partidos de izquierdas fue activa y pública. En 1932, durante el bienio republicano, se celebró en Pamplona la Semana Pedagógica con el objetivo de orientar a las maestras y maestros sobre metodología moderna, donde participó Camino Oscoz. Fue una mujer muy culta y preocupada por su entorno y la enseñanza. En 1935 Oscoz se integra en la organización llamada Socorro Rojo Internacional, que después de la Revolución de Asturias de 1934, se ocupaba de ayudar a los encarcelados en el Fuerte San Cristóbal. Camino Oscoz fue militante de izquierdas y republicana, secretaria del PCE y afiliada a la FETE-UGT.

El 31 de julio de 1936 fue detenida, encarcelada y posiblemente vejada en Pamplona. Días después, el 10 de agosto, un grupo de falangistas la llevó a Urbasa y la arrojó desde el Balcón de Pilatos.

homenajes María Camino Oscoz fue homenajeada en 2016, junto a los 32 maestros asesinados y cientos más represaliados en Navarra tras el golpe de 1936, en un acto impulsado por el Gobierno de Navarra. Durante el acto se inauguró una placa con sus nombres en la plaza de San José, donde se ubicaba la antigua Escuela de Magisterio de la capital navarra. Hasta donde se tiene conocimiento a día de hoy, María Camino Oscoz es la única maestra asesinada a causa del golpe militar de 1936.

El pasado 12 de agosto, el pueblo de Güesa, donde fue maestra, le rindió un homenaje con la colocación de una placa en la escuela, hoy inactiva, y que se mantiene abierta para ser visitada con mobiliario de principios del siglo pasado. Al acto acudieron los familiares más directos que agradecieron el cariño recibido por el Valle del Salazar y animaron a “seguir investigando, recordadando, y si es posible, buscando la reconciliación”. - I.Z./ D.N.