Nerea Lafraya e Idoia López de Dicastillo son dos amigas de la Txantrea unidas por su amor por las dantzas. Nerea dejó de bailar el año pasado e Idoia lo abandonó algo antes por los estudios. Sin embargo, se juntaron el último domingo de abril en el Día de Mayordomos, donde pudieron bailar juntas. “No sé explicarte lo que supone, llevaba prácticamente 15 años sin bailar, siempre se te queda ese gusanillo y ese día se me ponían los pelos de punta”, relata Idoia. Juntas revivieron aquella sensación que les llevó a fantasear sobre crear un grupo de dantzas en su barrio, ya que aunque en su momento lo había, después de la pandemia desapareció. Entre broma y broma nació DanTXaldi, “con tx de la Txantrea”, explica la pareja.

Para dar a conocer el proyecto, crearon un cartel y un texto de presentación que difundieron por whatsapp y redes sociales. Dentro de que es un grupo para gente adulta, no pedían un nivel de conocimiento ni pusieron un límite de edad por lo que empezaron a recibir llamadas y mensajes de personas de todas las edades. “Van a salir dos grupos, ambos orientativos, uno de gente desde los 20 a los 50 años y el de veteranos de gente desde los 50 años hasta los 70, de entre ocho y diez personas cada uno. Lo que queremos es que cada uno decida en cuál quiere estar, dependiendo de cómo se vea”.

No está dirigido únicamente a los vecinos de la Txantrea, puede apuntarse cualquier persona y aclaran que formar parte del grupo no tiene ningún tipo de coste: “Teníamos claro que queríamos que fuese así porque no es ningún curso, no vamos a dar clases, todo aprenderemos a la vez y todos tendremos que colaborar”, explican las impulsoras. Su objetivo es llegar a ser un grupo oficial y que cuenten con ellos para diferentes actuaciones. 

Dar el paso

Nerea bailaba en Noáin, donde vivió durante 10 años pero al volver a la Txantrea, tuvo que dejarlo: “Quienes bailamos sabemos que es algo que se lleva dentro, cuando lo dejé en octubre o noviembre no me entraba en la cabeza que no fuese a volver a bailar”. Así fue como empezó a darle vueltas a la idea de impulsar un grupo. “Cuando volví a la Txantrea, me di cuenta de que no había ninguno”.

Reconocen que a ambas les sorprendió que no hubiera, por eso, Nerea se puso en contacto con el presidente de la Federación Navarra de Dantzaris, Juan Carlos Ornat, para conocer la trayectoria del barrio y él fue quien le explicó que aunque habían existido grupos, en el momento no había ninguno, por lo que la animó a seguir adelante.

Ambas se llevaron una grata sorpresa cuando vieron que los vecinos recibían bien la iniciativa y se animaban a formar parte de ella. “Se ha visto que la gente tiene muchas ganas, simplemente hacía falta que alguien diese el paso”, apuntan las dantzaris.