El martes cierra la carretera de la Universidad de Navarra
El cierre permanente será en el tramo comprendido entre las rotondas con la calle Esquíroz y la prolongación de Fuente del Hierro
La carretera que atraviesa el campus de la Universidad de Navarra, en el tramo comprendido entre las rotondas con la calle Esquíroz y la prolongación de Fuente del Hierro, se cierra definitivamente el próximo 19 de agosto.
El incremento de los accidentes registrados en la zona, y su gravedad, ha llevado a esta clausura, que implica también el cierre de los accesos a los aparcamientos de la Universidad de Navarra desde esa misma carretera, explican desde el Ayuntamiento de Pamplona.
La carretera se va a cerrar con elementos tipo new jersey y la correspondiente señalización. Solo podrán circular en determinadas direcciones vehículos expresamente autorizados, como los de emergencias y servicios.
"La medida obedece al creciente tráfico en la zona, que se ha incrementado en 1.814 vehículos por día en los últimos diez años, con una intensidad media de 9 vehículos por minuto y unos 5.000 por día. Entre los años 2020 y 2025, se han contabilizado 135 accidentes, de los que 54 son directamente atribuibles a la estrechez de la vía", indican desde el consistorio pamplonés.
El cierre va a impedir atravesar la carretera de la Universidad desde el barrio de Azpilagaña hasta la avenida de Aróstegui, por lo que desde el área de Seguridad y Convivencia Ciudadana se propone como alternativa, en los tránsitos interurbanos, la A-15 o Ronda Oeste, y para los tránsitos urbanos, la avenida de Navarra. "Ambas vías sí reúnen las condiciones adecuadas para soportar el tráfico de vehículos", subraya el Ayuntamiento de Pamplona.
La carretera que atraviesa el campus entre la rotonda de la calle Fuente del Hierro y la rotonda de la calle Esquíroz, paralela al río Sadar, será a partir de ahora Zona de Acceso Controlado (ZAC) y el tráfico de esta carretera, de propiedad municipal, estará restringido a vehículos autorizados (emergencias, servicios, proveedores o personas con movilidad reducida). Los accesos los vigila, a través de cámaras de seguridad recientemente instaladas, el Ayuntamiento de Pamplona.
Con el cierre del tramo de la carretera del campus, permanece abierto al tráfico el vial desde la rotonda en la ronda de Azpilagaña hasta la rotonda del Polideportivo, siendo de un único sentido en esa dirección. Para dirigirse hacia Pamplona, hay que subir por la calle Esquíroz. En el otro extremo, desde la avenida de Aróstegui se puede acceder hacia el campus, pero hay que girar a la izquierda en la confluencia con la prolongación de Fuente del Hierro.
Para facilitar la accesibilidad, el campus ofrece cuatro puntos de bicicleta eléctrica en alquiler del servicio municipal, 13 bicicleteros distribuidos por el campus y cuatro paradas del transporte urbano comarcal.
UPN no comparte el cierre
Por su parte, el grupo municipal de UPN en el Ayuntamiento de Pamplona ve "precipitada" la decisión de cerrar la carretera de la Universidad de Navarra, al considerar que "no existen estudios técnicos ni informes rigurosos que respalden esta medida, que garanticen que es la mejor solución ni que justifiquen su urgencia".
La formación ha criticado que Asiron "no haya presentado un estudio de tráfico que evalúe cómo se redistribuirán los vehículos que transitan por esta vía, 5.000 al día según el Ayuntamiento de Pamplona, y qué consecuencias tendrá la medida en otras calles ya saturadas, como la avenida de Navarra y algunas del barrio de Iturrama, que podrían sufrir colapsos". "Han decidido su cierre sin analizar el efecto que ese volumen de vehículos tendrá en las calles citadas ni en las cercanas, ya que algunas de ellas muestran saturación en diferentes momentos del día", ha advertido.
Apeo de árboles
El pasado 6 de agosto comenzaron los trabajos de apeo de árboles enfermos en el campus de la Universidad de Navarra. Los que conllevan "riesgo extremo de caída" por la inestabilidad de su estructura muchos con oquedades en sus troncos y comprometen la seguridad de conductores y viandantes", aseguraron desde el centro docente. La actuación se enmarca en el plan para la renaturalización del espacio, que contempla la plantación de más de 800 ejemplares de especies autóctonas.
Una intervención que comenzó en abril, cuando se plantaron 115 robles, 41 mostajos, 39 arces y 29 olmos en la zona más próxima al polideportivo. El plan, entre otras acciones, recreará el bosque autóctono de la cuenca de Pamplona compuesto mayoritariamente por robles prestará especial atención a la regeneración de las riberas del río y el desarrollo de paisajes para actividades de educación ambiental del futuro Museo de Ciencias de la Universidad.
Para el apeo de los ejemplares enfermos, sobre todo chopos lombardos junto al río y en la carretera de acceso al centro Donapea y ejemplares de álamo blanco ubicados en la Avenida de Navarra, entre el campus e Iturrama, la Universidad ha realizado hasta tres estudios y peritajes para conocer la salud de estos árboles, los más antiguos del campus.