El frontón del Navarra Arena, ese mastodóntico recinto concebido para albergar citas de excepción, se ha convertido en el feudo del Masters CaixaBank. Esta réplica veraniega del Parejas, creada en plena pandemia como alternativa a la caída en cadena de todas las ferias estivales, no sólo sobrevive sino que gana peso en la era post-covid. Tras un periplo por diferentes localidades de Euskal Herria que arrancó a finales de julio en Urrestilla, la tercera edición de esta competición desembocará en el nuevo templo de la vieja Iruñea con la disputa los días 29 de septiembre y 1 de octubre de la fase final, que ha sido presentada hoy sobre el terreno. En ella, Joseba Ezkurdia y Jon Mariezkurrena parten con la misión de defender la corona conquistada hace un año.

De momento, el dúo navarro marcha por el buen camino para volver a ejercer de profeta en su tierra. Se ha clasificado directamente a las semifinales al acabar la liguilla inicial en primera posición, con cuatro victorias en su zurrón. Por todo ello, es innegable que parten con la vitola de favoritos. Ezkurdia, no obstante, prefiere relativizar la cuestión. "Estamos contentos de estar aquí de nuevo, pero sabemos que es muy difícil ganar otra vez. Hay mucha competencia. Ojalá podamos pelear por esa txapela, que es algo bonito". El Navarra Arena, además, es un lugar especial para Ezkurdia, quien allí ganó su dos primeras títulos del Cuatro y Medio: "Me da muy buenas vibraciones y es un frontón ideal para nosotros, bueno para atacar". Un dato a tener en cuenta, ya que su media naranja en esta dupla campeona es un bombardero como Mariezkurrena, que este verano está en plenitud de condiciones: "Está jugando una barbaridad, marcando muchas diferencias y tengo que aprovechar eso".

El aludido, Mariezkurrena, reconocía que el suyo con Ezkurdia en este Masters CaixaBank es, pese a militar en empresas diferentes -Jon en Baiko y Joseba en Aspe-, un matrimonio muy bien avenido: "Ya se vio el año pasado que en la cancha nos entendemos muy bien. Fuera de ella también tenemos muy buena relación y eso hace que sumemos más como pareja". El zaguero de Berriozar está siendo una de las sensaciones de esta época de canícula por sus continuas exhibiciones de pegada: "Estoy contento. Este final de verano está siendo bastante duro, porque desde mediados de agosto estoy jugando muchos partidos. Pero las manos me han respondido, físicamente me encuentro bien y a ver si este septiembre lo terminamos igual".

Para repetir título, Ezkurdia y Mariezkurrena deberán vencer antes en semifinales a Erik Jaka y Julen Martija, el único binomio que ha sido capaz de derrotarles en la liguilla previa: "Erik está en un momento muy bueno, Julen también y suman mucho como pareja. En Altsasu, contra ellos, no jugué bien, regalé bastante. Habrá que subir el nivel para poder ganarles". Desde el otro bando, Martija tiene claro que, pese a aquella victoria que arañaron frente a los campeones en la liguilla, "en semifinales es otro mundo". Es consciente de que le tocará una tarea complicada ante Mariezkurrena: "Está a un nivel buenísimo y es muy difícil sostenerle ahí atrás". El zaguero de Etxeberri y Jaka están en semifinales porque, pese a perder en su duelo de playoff ante Altuna-Imaz por 18-22, sumaron más tantos que Larrazabal-Zabaleta frente Peña-Rezusta (22-15). Pero eso no les resta en absoluto confianza: "Hemos conseguido meternos y vamos a darlo todo".

La otra semifinal enfrentará a los citados Altuna-Imaz con Peña-Rezusta. "Creo que va ser dura e igualada. A ver si podemos meternos en la final y vivir un fin de semana bonito", indicaba el delantero de Amezketa. "Este es un campeonato de mucho nivel, difícil. Seguro que habrá un buen ambiente y lo disfrutaremos", añadía el propio Altuna.

Las dos semifinales se disputarán el viernes 29 a partir de las 21.15 horas, empezando por la que disputarán los favoritos, Ezkurdia-Mariezkurrena, ante Jaka-Martija. El domingo 1 de octubre será el turno de la final (17.00 horas), con precios que oscilan entre los 40 euros de la butaca de cancha y los 10 del rebote alto.