PAMPLONA - La elección por parte de Uxue Barkos de la abogada María José Beaumont como titular de Justicia del Gobierno del cambio provocó que buena parte de la caverna mediática y política arremetieran contra este nombramiento. A los textos críticos con esta decisión que dedicaron ayer varios medios de comunicación se sumó el Ejecutivo central, que puso el grito en el cielo por la proximidad de Beaumont con EH Bildu, pese a que la próxima consejera nunca ha militadi en un partido, como aclaró la líder de Geroa Bai.

La vicepresidenta Soraya Sáenz de Santamaría calificó la designación como una “muy mala noticia” porque la coalición soberanista tiene “el peor currículum en cuanto a la defensa de los derechos y las libertades”. “Cuando se juntan en estos pactos radicales y residuales se dan malas noticias como esta”, notificó la número dos del Gabinete Rajoy.

Barkos replicó que la abogada, propuesta por EH Bildu para el Gobierno foral, tiene una “acreditada y conocidísima” trayectoria, carrera relacionada “con la defensa desde el terreno de la legalidad más absoluta de una posición contraria a una obra como el pantano de Itoiz”. Además, la futura presidenta navarra, “para tranquilizar a quien pudiera tener algún tipo de nerviosismo”, puntualizó que “el acuerdo programático es absolutamente nítido y claro con el principio de legalidad”. Barkos apuntó que “los consejeros lo son a propuesta de las formaciones que hemos tenido oportunidad de hacerlo, no son ni de Bildu, ni de Geroa Bai, ni de Podemos, ni de Izquierda-Ezkerra, son del Gobierno de Navarra”.

Sus palabras cayeron en saco roto en las filas populares. De esta modo, la portavoz parlamentaria del PPN, Ana Beltrán, aseguró que este nombramiento es “como poner al lobo a cuidar de las ovejas”, considerándolo como “un motivo de preocupación e inquietud”. Hasta el director general de la Policía, Ignacio Cosidó, se permitió criticar que la consejería de Interior recaiga en alguien con un perfil del agrado de EH Bildu.

Por su parte, el portavoz de Amaiur en el Congreso, Rafael Larreina, pidió la comparecencia urgente Sáenz de Santamaría para exigirle una rectificación de sus declaraciones. A su entender, el cumplimiento estricto de su responsabilidad institucional no consiste “en combatir a gobiernos democráticamente legítimos”, como el navarro, “sino prestar la colaboración necesaria para dar respuesta a los problemas diarios de la ciudadanía”. Asimismo, el secretario de Política de Podemos, Iñigo Errejón, añadió que EH Bildu es un partido legal y que como tal “tiene derecho a jugar en el juego político”. El más duro en su discurso fue el parlamentario vasco de UPyD, Gorka Maneiro, quien denunció con esta elección la “impunidad” de una situación en la que “los herederos de ETA siguen campando a sus anchas”.- D.N./Agencias