La pelea electoral más directa está en la derecha. UPN y PP se disputan el espacio electoral de Navarra, y aunque históricamente los regionalistas han estado siempre muy por delante de los populares, las expectativas esta vez están más abiertas. Tanto es así que UPN apela ya directamente al “voto útil” de la derecha para garantizar el poder municipal, donde ser la primera fuerza facilita mucho las cosas.
Pero el PP se siente fuerte y disputa ya abiertamente ese espacio. El caso más claro es el de Pamplona, donde ha situado a Carlos García Adanero, diputado expulsado de UPN por no acatar la disciplina del partido y apoyar la reforma laboral del Gobierno de Pedro Sánchez. Adanero contó ayer con la presencia de toda una referencia ideológica de la derecha española como Cayetana Álvarez de Toledo, que puso al candidato del PP como ejemplo de “dignidad y el sentido de la política”.
Adanero se ha convertido en un todo un símbolo para la derecha en el Congreso. Una de las voces más críticas con el Gobierno de Sánchez y un activo electoral para aglutinar a esta corriente. No está claro que eso vaya a funcionar en Navarra, pero el mensaje del PP en la capital navarra es tan simple como claro. “Nosotros no vamos a pactar con el sanchismo, al sanchismo hay que derrotarlo, no hay que pactar con él, hay que ganarle en las urnas, democráticamente, el sanchismo es Chivite (PSN) en Navarra y Asiron (EH Bildu) en Pamplona, todos son lo mismo”, argumentó ayer Adanero.
La respuesta vino después por parte de sus excompañeros de coalición, que replican que “no hay más alternativa” que UPN. “Tenemos que aglutinar, congregar, aunar el voto en torno a quien puede liderar, a quien puede frenar a EH Bildu, la única formación política que es alternativa. Es el modelo de UPN o el modelo de EH Bildu, no hay ninguna otra realidad”, defendió ayer Javier Espaza.
Alvarez de Toledo
“Bildu quiere lo que no pudo ETA”
Apoyo a Adanero. La diputada del PP Cayetana Álvarez de Toledo señaló ayer en Pamplona que “lo que ETA no consiguió matando, lo quiere conseguir Bildu de la mano del PSOE” y definió la cita del 28 de mayo como “el primer paso para la victoria de Núñez Feijóo”. “El sanchismo es un proyecto de poder a largo plazo, la impugnación de la transición, es un plan para sustituir el orden constitucional. Sánchez y sus aliados necesitan una oposición separada, no vamos a darles ese gusto, el PP no es el mal menor, no somos la versión vegetariana del PSOE. Somos la alternativa”, argumentó la diputada popular, que afirmó que “Navarra jamás será anexionada para dar satisfacción al Otegi de turno”.
