El Congreso de los Diputados ha rechazado tramitar la proposición de ley contra el proxenetismo. El PSOE se ha quedado solo este martes y su iniciativa abolicionista no ha cosechado los apoyos ni de su socio de Gobierno ni de sus aliados parlamentarios ni del Partido Popular.

El PP había recriminado horas antes al PSOE que haga un indigno uso y abuso del feminismo con fines electorales y que su propuesta "lo único que busca es dividir", por lo que la diputada popular Ana Alós le ha solicitado que la retire para alcanzar un consenso en el seno del Pacto de Estado contra la Violencia de Género.

Se trata de la segunda ocasión en la que los socialistas someten al Pleno de la Cámara Baja la proposición de ley que busca modificar el Código Penal para endurecer el castigo al proxenetismo, multar el pago por sexo y castigar con cárcel la tercería locativa, esto es, penar el lucrarse por destinar un inmueble o cualquier otro espacio para que otra persona ejerza la prostitución, aun con su consentimiento.

Pocos apoyos

En esta ocasión, sólo Coalición Canaria y el BNG habían mostrado su apoyo a la iniciativa.

Consciente de que el futuro de la norma pendía de un hilo, la portavoz socialista de Igualdad en el Congreso, Andrea Fernández, se había dirigido al PP, Podemos y Sumar para pedirles que "aparquen los juegos, el regate corto y la política de bajo nivel" y la apoyen: "Estemos a la altura de las víctimas y de lo que compartimos como partidos responsables. Apostemos por la negociación y el acuerdo y por escucharnos durante el trámite parlamentario. (...) Les tiendo la mano, no lleguen ustedes tarde a este avance social", ha señalado.

Fernández ha sostenido que la raíz de la prostitución son el machismo y la violencia contra las mujeres y que es necesario afinar el Código Penal para perseguir de forma eficaz a los proxenetas.

El PP coincide en que la prostitución es una forma de violencia machista y en que es necesario cambiar el Código Penal para castigar el proxenetismo, pero considera que el PSOE no aprovechó la oportunidad brindada la pasada legislatura y que la propuesta es "absolutamente insuficiente" porque no da una solución real a las mujeres afectadas.

Recurrente durante el debate ha sido la acusación de que el grupo parlamentario socialista ha revivido la propuesta en esta legislatura con fines electorales: este extremo ha sido mencionado por el PP, el PNV, ERC y Sumar.

La diputada de Sumar Gala Pin ha denunciado que el PSOE recurre a un "populismo punitivo" porque hay un "contexto preelectoral" y hace un "uso electoralista de la vida de las mujeres que ejercen prostitución", mientras que el diputado del PNV Joseba Agirretxea ha criticado que el grupo socialista vuelva a proponer este debate "con elecciones a la vista".

"Este tema era muy importante para el PSOE, era tan importante que desde que se tomó en consideración lo olvidaron en el cajón y terminó la legislatura y hoy lo vuelven a proponer", ha sostenido.

Otra crítica que se ha repetido durante el debate ha sido que el texto defendido por los socialistas se limita a una reforma del Código Penal que pone en riesgo y criminaliza a las mujeres en situación de prostitución, las aboca a una mayor vulnerabilidad y marginalidad.

Isabel Pozueta, de Bildu, ha destacado que una propuesta "seria e integral" conllevaría mecanismos de protección sociolaboral, acceso a la vivienda para que las personas que se encuentran en situación de prostitución pudieran tener "una vida digna en condiciones dignas".

En este sentido, la diputada de Podemos Martina Velarde ha incidido en que para avanzar hacia la abolición de la prostitución es preciso desincentivar la demanda, dar alternativas vitales a las mujeres y desplegar una educación sexual obligatoria desde edades tempranas.

Desde Junts, Pilar Calvo ha dicho que la ley socialista "llevará a las prostitutas a poner en riesgo su integridad física" y a agudizar su estigmatización, pues las abocará a la clandestinidad.

La diputada de ERC Pilar Vallugera ha recriminado al PSOE que reavive una cuestión "que rompe al feminismo por la mitad" a las puertas de unas elecciones europeas y ha mantenido que sólo con una ley integral contra la trata y derogando la ley de extranjería se podrá proteger a las víctimas de la explotación sexual. "No tienen ni idea del destrozo que van a causar en la vida de muchas mujeres y sus familias", ha advertido.

Tanto Bildu como PNV y ERC han exigido que se ponga en marcha una subcomisión que estudie la realidad de la prostitución en España antes de legislar sobre ella.

Para Vox, tampoco la propuesta también es suficiente, pues se limita a prohibir y castigar, pero no ofrece alternativas a las mujeres en estos contextos ni aborda la inmigración ilegal.