El coste arancelario derivado de las nuevas medidas propuestas por Estados Unidos podría elevar el arancel medio aplicado a las exportaciones navarras hasta el 37 %, lo que supondría un sobrecoste de hasta 43 millones de euros, según las estimaciones del Gobierno de Navarra.

Así lo ha avanzado este jueves en el pleno del Parlamento el consejero de Industria y Transición Ecológica, Mikel Irujo, quien ha informado de que el Ejecutivo foral está elaborando un informe detallado sobre la situación, cuya versión final se espera publicar en las próximas dos semanas. “Tenemos que tener toda la información en profundidad para poder acordar medidas efectivas”, ha indicado.

El informe, ha explicado, analiza tanto el impacto por sectores como el coste económico que implicarían los aranceles adicionales en función del tipo de producto exportado y su índice de vulnerabilidad.

Irujo ha recordado que el pasado 2 de abril el expresidente estadounidense Donald Trump anunció aranceles del 20 % para la Unión Europea, aunque una semana después se suspendió su aplicación durante 90 días y se sustituyeron por un arancel universal del 10 %. “En este momento no hay esa medida anunciada y se sigue negociando entre la Unión Europea y Estados Unidos”, ha subrayado.

El consejero ha insistido en que “la política comercial común es una competencia exclusiva de la Unión Europea” y que el Ejecutivo navarro trabaja en el marco de esas negociaciones para proponer posibles medidas de apoyo a los sectores más expuestos.

Navarra, la más exportadora

Según ha detallado, Navarra es la comunidad más exportadora del Estado, con más de 10.000 millones de euros exportados en 2019, 2022, 2023 y 2024, y presenta el mejor saldo comercial, con una tasa de cobertura del 156,2 % y un volumen exportador per cápita un 60 % superior a la media nacional.

En 2024, ha asegurado Irujo, un total de 589 empresas navarras exportaron bienes a Estados Unidos, de las cuales el 36 % lo han hecho de forma regular en los últimos cuatro años. Ese comercio representó el 3,6 % del total exportado por la comunidad, con un valor de 367 millones de euros frente a unas importaciones de 132 millones, lo que dejó una balanza positiva de 235 millones.

Los principales sectores exportadores a Estados Unidos son los bienes de equipo y las semimanufacturas, que suman cerca del 70 % del total, seguidos de los productos alimentarios (19,5 %). Por productos, el consejero ha destacado las máquinas y aparatos mecánicos (26 %), el material eléctrico (13 %), las legumbres y hortalizas congeladas (11 %) y las bebidas, especialmente vino (4,6 %).

En cuanto al impacto por partidas, los datos preliminares del informe identifican como más afectadas las verduras congeladas, las manufacturas de acero, los productos manufacturados y los componentes de automoción. En el caso de las verduras, el arancel pasaría del 14 % actual a casi el 25 %, debido a la aplicación adicional del 10 %. En el caso del acero y la automoción, aunque el nuevo gravamen alcanzaría el 25 %, el menor valor exportado limitaría su coste arancelario.

Debate parlamentario

El consejero respondía a una interpelación del portavoz de UPN, Javier Esparza, quien ha advertido de que en Estados Unidos hay "un presidente que se preocupa únicamente por sus intereses y que está perjudicando a España y a Navarra". Ha reclamado "un plan para proteger a las empresas navarras de las políticas de Trump" y ha lamentado que, hasta el momento, no se ha conocido ninguna propuesta concreta. "Cada vez que hay una crisis este gobierno mira a Madrid y no toma las decisiones que se tienen que tomar", ha afirmado, y ha pedido "valentía para asumir la realidad que toca en cada momento".

Desde el PSN, Javier Lecumberri ha calificado de "abusiva e injustificada" la política arancelaria "errática" impuesta por Trump, y ha apostado por una respuesta basada en "la prudencia", en medidas preventivas y en una "coordinación estrecha" con la Unión Europea y el Gobierno de España, a quienes ha recordado que corresponden las competencias en comercio exterior.

Laura Aznal, portavoz de EH Bildu, ha considerado "preocupante" la guerra comercial impulsada desde Estados Unidos y ha señalado que sectores como la siderurgia, las energías renovables y "especialmente la agricultura" son los más afectados. Pese a que ha reconocido que la exposición comercial con Estados Unidos es alta, ha matizado que es "menor que la de Alemania, Francia o Italia". En ese contexto, ha defendido el impulso del comercio y del consumo local.

Por parte de Geroa Bai, Mikel Asiain ha cuestionado la estabilidad de la política estadounidense: "Hay políticos que hunden la bolsa para hacerla subir dos días después: es la táctica de los negociantes que se aprovechan al comprar barato y vender caro". En su opinión, "la Unión Europea está en el ojo del huracán" y ha planteado dudas sobre "hasta cuándo se pueden tomar medidas y hacer planes ante una política tan carente de estabilidad y rigor".

Javier García, del PPN, ha criticado la "preocupante falta de visión, estratégica y diplomática" del Gobierno de España ante esta situación. Ha asegurado que mientras otras potencias han sabido protegerse, "el Partido Socialista vuelve a optar por una política errática y sin rumbo, con una importante dependencia de otros actores". A su juicio, "hace falta coherencia".

Miguel Garrido, de Contigo-Zurekin, ha afirmado que con la llegada de "la ultraderecha a la Casa Blanca" se ha destruido "la Alianza Atlántica y toda la arquitectura global que se generó tras la II Guerra Mundial". Ha asegurado que "el bloque occidental ha dejado de existir" y que "quienes reclamamos soberanía europea hemos pasado de ser unos locos al sentido común".

Finalmente, Emilio Jiménez, de Vox, ha defendido la necesidad de "proteger el producto español", es decir, a nuestros agricultores, ganaderos y a los trabajadores de la industria. Ha reclamado una política europea "que mire por sus intereses, al igual que respetamos que Estados Unidos mire por los suyos".