El Ejército es el propietario del fuerte de San Cristóbal y no quiere que ni voluntarios de asociaciones ni medios de comunicación visiten el edificio. El Ministerio de Defensa, a través de la Delegación en Navarra, ha remitido un comunicado al Parlamento de Navarra en el que hace saber que no tiene problema en autorizar la visita que a finales de enero pidió la Comisión de Memoria y Convivencia, Acción Exterior y Euskera, pero que en ningún caso se hará en los términos planteados originalmente.
Geroa Bai y Contigo Navarra-Zurekin Nafarroa propusieron llevar a cabo una visita al fuerte de Alfonso XII –con una trágica historia como penal militar y cárcel casi desde su inauguración, en 1919– guiada por voluntariado de la Asociación Txinparta Fuerte de San Cristobal Red de Memoria Colectiva y con presencia de medios de comunicación.
Restricciones
Ahora, en un escrito firmado el pasado día 4, el Ejército autoriza la visita de los parlamentarios, pero dispone que solo podrán recorrer el fuerte los miembros de la Comisión de Memoria; que los guías serán militares, y no voluntarios; y que no está permitida la entrada a medios de comunicación. La respuesta, con un tono bastante restrictivo, llega pocos días después de que el Gobierno foral haya dado los primeros pasos, junto con el Gobierno de España, para declarar el fuerte como lugar de memoria. De hecho, los planes de las administraciones pasan por erigir un centro de interpretación histórica en parte del edificio que hoy Defensa mantiene prácticamente en secreto.
No es la primera vez en los últimos tiempos en los que Defensa niega visitas al Parlamento o impone restricciones que desvirtúan el propósito de los cargos electos.
Más restricciones: el año pasado, y para visitar el polígono de tiro de Bardenas
En octubre del año pasado, Defensa vetó en el último momento una visita de parlamentarios al campo de tiro de las Bardenas con la excusa de que “razones operativas” impedían llevar a cabo una cita pedida con mucha antelación y que ya estaba incluso programada.
Sin embargo, esas mismas razones operativas no impidieron que a los pocos días el parque sí permitiera la celebración de varias baterías de caza menor en algunas parcelas pegadas al polígono de tiro. La gestión del episodio por parte de Defensa mereció que Contigo Navarra hablara de “opacidad” y “falta de transparencia” y hubo preguntas parlamentarias registradas en el Congreso (a cargo de los diputados Enrique Santiago y Félix Alonso, ambos de Sumar) y de la senadora autonómica por Navarra, Uxue Barkos.
Txinparta: "Nos parece absurdo"
Consultado por este periódico, Koldo Pla, presidente de la asociación Txinparta, considera “absurdo” que Defensa impida que Txinparta tome parte en las visitas, aunque “no es la primera vez”.
“Es absurdo que a quienes más hemos estudiado el origen de este fuerte, quienes sabemos qué usos tuvo y qué relevancia histórica tuvo, se nos impida estar en la visita”, apunta. Además, la decisión no tiene demasiado sentido porque en el pasado ya han hecho visitas guiadas conjuntas entre la asociación y los militares, por lo que el argumento que ha esgrimido Defensa de que se trata de una instalación militar y que por eso solo puede estar guiada por militares no tiene validez. “Nos resulta extraño y esta decisión creo que la toman porque hay autoridades y periodistas de por medio”, razona.
"Es una decisión absurdo que toman porque hay autoridades y medios de comunicación de por medio"
Pla ha querido aprovechar la llamada para poner de manifiesto que la asociación Txinparta no sabe nada de los últimos pasos para designar el fuerte como lugar de memoria, porque "nadie en la dirección general de Paz y Convivencia" se ha puesto en contacto con ellos o les ha convocado para una reunión. La última que tuvieron fue hace casi un año.
