El Vaticano está en vilo. Con la muerte del papa Francisco a los 88 años en su residencia de Santa Marta, el mundo asiste al inicio de una nueva etapa en la Iglesia Católica… o quizás, según algunos, a su final. Y no por decisión humana, sino por lo que muchos consideran una predicción inevitable: la enigmática profecía del “Papa Negro” anunciada por Nostradamus, el astrólogo francés del siglo XVI que supuestamente anticipó, siglos antes, la caída de la Iglesia tal y como la conocemos.

Tres Papas, una advertencia y un destino

Según los seguidores de Michel de Nôtre-Dame, más conocido como Nostradamus, el camino hacia el Apocalipsis ya estaba trazado. En una de sus misteriosas cuartetas, escrita en el año 1555, el francés habría predicho la llegada de tres figuras clave al trono de San Pedro:

  1. Un Papa extranjero, identificado por los intérpretes como Benedicto XVI, alemán y rompedor de la tradición italiana.
  2. Un Papa anciano, Francisco, el pontífice de avanzada edad elegido en 2013.
  3. Y finalmente, un Papa Negro, cuya llegada marcaría el inicio del Juicio Final.

Lo inquietante es que, con el fallecimiento de Francisco, esta secuencia estaría a punto de completarse.

¿Quién podría ser el "Papa Negro"?

Las interpretaciones varían. Algunos creen que la profecía apunta literalmente a un papa de origen africano. Y los nombres que suenan con más fuerza en el cónclave actual parecen ajustarse a esa posibilidad:

Peter Turkson, cardenal ghanés de 76 años, reconocido por su labor en temas sociales y ecológicos.

Robert Sarah, de Guinea-Conakri, conservador, profundo en su fe, y de 79 años.

Ambos figuran entre los favoritos a ser elegidos y representarían un hecho histórico: la llegada del primer papa africano moderno.

Otros, sin embargo, sostienen que el "Papa Negro" ya ha existido. Esta teoría se basa en la identidad jesuita de Francisco: los miembros de esta orden visten tradicionalmente de negro y su líder es conocido como el “Papa Negro” dentro del ámbito eclesiástico. De hecho, Francisco es el primer papa jesuita de la historia.

Más allá de Nostradamus: la sombra de San Malaquías

La predicción de Nostradamus se entrelaza con otra aún más antigua: la del arzobispo irlandés San Malaquías, quien en el siglo XII escribió una lista profética de 112 papas. Francisco ocuparía el puesto número 111. El siguiente sería “Petrus Romanus”, descrito como el último pastor antes del colapso de la Iglesia y el advenimiento del Juicio Final. El nombre podría ser simbólico, pero su coincidencia con las circunstancias actuales resulta, al menos, inquietante.

Y hay más. En la Basílica de San Pablo existe una serie de retratos papales que, desde hace siglos, ilustran a cada sumo pontífice. Tras la imagen de Francisco, queda espacio solo para uno más.

Nadie puede negar que las predicciones de Nostradamus han marcado momentos históricos: la Revolución Francesa, el ascenso de Hitler o incluso los atentados del 11 de septiembre. Sus cuartetas, llenas de símbolos, ambigüedades y referencias astrológicas, han sido interpretadas y reescritas durante siglos. Pero el eco de sus palabras resurge con más fuerza en tiempos de incertidumbre.

Para los escépticos, todo esto no es más que un fenómeno cultural que se reinterpreta en cada crisis. Para los creyentes, es una advertencia que se está cumpliendo paso a paso.

¿Un último Papa antes del fin?

Con 133 cardenales con derecho a voto y 33 de ellos provenientes de África, el cónclave está en marcha. Lo que suceda en los próximos días no solo definirá el futuro de la Iglesia Católica, sino que podría ser, según los vaticinios antiguos, la antesala del Juicio Final.

¿Estamos frente al último Papa? ¿Será literal la llegada del “Papa Negro”? ¿O la profecía ya se cumplió con Francisco? Las respuestas, si existen, están por revelarse. Mientras tanto, el mundo observa… con asombro, con temor y, sobre todo, con una extraña sensación de que algo profundo, y tal vez profético, está por ocurrir.