Eccemas: qué son y cuáles son las pautas de higiene para tratarlos
Los eccemas son procesos inflamatorios de la piel, caracterizados por erupciones o ampollas que dan lugar a costras y producen una sensación de picor y escozor que, de persistir, deben ser tratados por un dermatólogo
La piel es la principal barrera de nuestro cuerpo y se encarga de defendernos frente a los posibles agentes externos que buscan penetrar en nuestro organismo. Por esta razón, es normal que, ante la presencia de ciertos irritantes, la piel reaccione desfavorablemente, dando origen al eccema.
Se trata de un proceso inflamatorio de la dermis que necesita ser tratado desde que empiezan a desarrollarse.
Los eccemas pueden aparecer en cualquier parte del cuerpo, aunque las más comunes son los eccemas en cara y cuello, piernas, brazos y manos. El dermatólogo será el encargado de identificar el tratamiento más adecuado dependiendo de la causa que lo haya provocado. La recomendación general en todos los casos es evitar el rascado continuo, ya que puede favorecer su persistencia, y seguir unas pautas generales de higiene:
Pautas de higiene
Mantener la piel hidratada con productos recomendados por los expertos; evitar los lavados excesivos para que no se reseque en exceso la zona.
Usar jabones específicos para la higiene de la piel delicada.
Tras la higiene, se debe secar la piel sin frotar en exceso para no incrementar la irritación.
Evitar agentes irritantes. El agua en general es uno de los principales causantes de irritación, sobre todo en aquellas áreas con aguas muy duras. Así, se recomienda evitar una higiene excesiva, realizando duchas cortas y con agua tibia.
Proteger las zonas afectadas. En algunos casos, principalmente en los eccemas de contacto localizados en las manos, puede ser de gran utilidad el empleo de guantes recubiertos de algodón en su interior para evitar la irritación con sustancias externas y la producida por el contacto del plástico de los guantes. En pacientes con eccema alérgico, deberán evitar en la medida de lo posible el alérgeno en cuestión (aunque a veces esto puede ser complicado).
Acudir al dermatólogo. En el caso de eccemas recurrentes, persistentes o de gran extensión, se recomienda acudir a un especialista en dermatología para realizar un correcto diagnóstico y tratamiento de las lesiones.