La historia de Susana Nagore empezó con esa frase que precede a todas las buenas anécdotas que merece la pena contar: “No hay huevos”, le espetó un amigo que le incitaba a cantar una jota a San Fermín instantes antes del inicio del encierro. Tras el envite de su amigo, a Susana le faltó tiempo para convencer a Andoni Armendáriz, acordeonista, y bajar a la calle Santo Domingo para alentar con una jota a los corredores que se congregaban bajo la hornacina del santo morenico. Era 7 de julio de 1995. Susana le comentó su idea al mítico corredor Javier Hermosilla -cabecilla por aquel entonces de los cánticos a San Fermín-, quien accedió de buen grado a hacer un hueco a Susana y Andoni entre el primer y el segundo cántico. 

Minutos antes de las 8 de la mañana de aquel 7 de julio de hace más de 25 años, Susana cantaba la jota No sabe qué es emoción a San Fermín por primera vez. “Fue muy especial, tanto que al año siguiente volvimos a repetir y también al otro, hasta que se convirtió en una tradición que la hemos seguido hasta nuestros días”, comenta la jotera, que ayer, 7 de julio de 2022, volvió a cantar al santo tras dos años de parón por la pandemia: “Este año, tras la pandemia, ha sido especial, casi como volver a cantar por primera vez”.

Un cántico especial

Susana ganó una cena tras cumplir aquella apuesta y, sin quererlo, instauró una de las tradiciones más simbólicas de los encierros. Ayer bajó a Santo Domingo con la acordeonista Goretti Martínez, ya que Andoni, su fiel escudero, sufre una lesión en el brazo que le ha impedido tocar el acordeón. “Ha sido doblemente especial este año. En 2020 cumplíamos 25 años cantando a San Fermín, pero la pandemia nos impidió celebrarlo, así que lo hemos hecho este año. Ha sido como cantar por primera vez”, relata Susana, que el pasado 25 de junio fue homenajeada por las peñas por cumplir un cuarto de siglo cantando al santo. “Ya allí estuve nerviosa; no me quería ni imaginar cómo iba a ser cuando cantase este 7 de julio”, incide.

"Este año, tras la pandemia, ha sido muy especial, casi como volver a cantar por primera vez"

Y es que pese a toda una trayectoria dedicada a la música -como jotera y antes como miembro del grupo Hermanos Nagore recorriendo las fiestas de toda Navarra- Susana sigue poniéndose nerviosa cuando canta a San Fermín: “Para mí es muy especial y es un momento de muchos nervios. Al final, los corredores también están nerviosos, es el primer encierro, y esa adrenalina que tienen te la contagian a ti”.

De apuesta a tradición Aquel primer cántico de 1995 emocionó tanto a corredores y espectadores, que fueron ellos quienes al año siguiente pidieron a Susana y a Andoni que volviesen a repetir. “Conforme se iban acercando los Sanfermines la gente nos decía: ‘Oye, este año también bajaréis el 7 a cantar, ¿no?’ También nos escribían corredores de Madrid y de Valencia para que fuésemos. Así que lo hicimos y como vimos que a la gente le gustaba pues lo hemos seguido haciendo hasta ahora”, explica.

A las 7.00 de la mañana, Susana y Goretti -en sustitución de Andoni- ya estaban dentro del recorrido, para impregnarse del ambiente e ir contagiándose de los nervios y la adrenalina que destilan los mozos. Conforme iban pasando los minutos, se acercaron al contingente de Policía Municipal que se encuentra dentro del recorrido. Tras el primer cántico a las 7.55 y con el recorrido ya a rebosar de corredores, Susana y Goretti se acercaron a la hornacina para cantarle al santo: “Es muy emotivo porque los propios corredores nos van abriendo paso. Antes de empezar a cantar, ellos mismos piden silencio a todo el mundo para que se escuche bien y ya empiezo a cantar”.

No sabe qué es emoción; quien no ha corrido el encierro.

No sabe qué es emoción; cuando, al sonar el cohete, se acelera el corazón

Su potente voz llegó a todos los rincones de la calle y algunos de los mozos presentes en el recorrido no pudieron contener las lágrimas. Al terminar, un estremecedor aplauso inundó la calle. “Al acabar siento una alegría inmensa ya sin nervios. Muchos nos abrazan y nos dan las gracias y ya entonan el segundo cántico. Nosotros nos vamos a seguir disfrutando”, concluye Susana.