En una programación de tan marcado acento local como la de estos Sanfermines, no podía faltar en el escenario de la Plaza del Castillo la mayor leyenda de nuestro rock. Hablamos, claro está, de don Enrique Villarreal Armendáriz, El Drogas. A lo largo de sus más de cuarenta años de carrera, han sido muchas las ocasiones en las que el artista navarro ha subido a alguno de los escenarios de nuestras fiestas. 

Ya con su grupo seminal, Barricada, el músico txantreano actuó varias veces en la plaza de los Fueros, tradicional lugar donde se celebraban los conciertos sanfermineros. Allí pensaban grabar un disco en directo en 1997. Lo tenían todo preparado: el director de cine Juanma Bajo Ulloa iba a dirigir la filmación de las imágenes y una unidad móvil había llegado desde Londres para registrar el audio, pero su concierto no pudo celebrarse: el 13 de julio de aquel año, ETA asesinó a Miguel Ángel Blanco y los Sanfermines fueron suspendidos. Finalmente, Barricada ofreció una actuación en la plaza de toros de Pamplona dos meses más tarde, el 7 de septiembre, y de ella salió su segundo elepé en vivo, Salud y rocanrol. 

Txarrena

Catorce años después, en 2011, aprovechando lo que en principio iba a ser un parón temporal en la andadura de Barricada, El Drogas grabó en la plaza de los Fueros otro directo con su proyecto paralelo, Txarrena, en el que le acompañaban Txus Maraví, Eugenio Aristu Flako y Brigi Duque, con quienes ya había grabado el álbum Azulejo frío. Pocos meses después llegó su polémica salida de Barricada, el grupo que él mismo había ideado a principios de los ochenta, y el proyecto paralelo se convirtió en principal. Mantuvo la misma formación, pero le cambió el nombre, pasando a utilizar la denominación de El Drogas.

Así ha venido funcionando en los últimos años, en los que ha dado rienda suelta a su creatividad, publicando el álbum triple Demasiado tonto en la corteza (2013) y el quíntuple Solo quiero brujas en esta noche sin compañía (2019), además de otros proyectos como conciertos para reivindicar la memoria histórica, giras con sonido más rythm’n’blues (incorporando teclados, metales y coristas), el disco grabado en directo en la Ciudadela en julio de 2016, Un día nada más, en el que contó con una interminable lista de invitados, o la publicación de varios poemarios o del libro disco 189 escritos con una mano enferma (2021). Una actividad febril que le ha hecho pasar de tocar en salas pequeñas a volver a hacerlo en recintos de muchísimo mayor aforo.

El último peldaño de esta ascensión pudo vivirse en el Navarra Arena en junio del año pasado, cuando agotó las entradas para poner punto y final a la gira que había desarrollado con repertorio exclusivo de Barricada, celebrando así el cuadragésimo aniversario de la formación de la banda. El resultado de los vivido aquella noche puede disfrutarse en la lujosa caja que ha publicado el sello navarro El Dromedario Records, que incluye cuatro vinilos, varios cedés y deuvedés, y un libro con fotos y letras manuscritas, entre otra memorabilia. 

Presente y futuro

Este es el presente de El Drogas, que se dispone a afrontar un nuevo punto de inflexión en su trayectoria: después de dos años girando con el cancionero de Barricada, toca ahora recuperar el suyo en solitario y preparar su nuevo trabajo, que, según ha adelantado, no se prevé que sea triple ni quíntuple, sino de unas dimensiones más estándar. Lo grabará con sus inseparables Txus Maraví y Flako Txarrena, pero sin Brigi, que ha retomado su actividad con Koma. Su lugar en las baquetas lo ocupará Nahia Ojeta, con quien ya han realizado algunas actuaciones durante las últimas semanas. Será, sin duda, una de las actuaciones más esperadas de estos Sanfermines 2024. Varios miles de personas se acercarán a la Plaza del Castillo para disfrutar de nuestro músico más representativo, todo un referente en la escena nacional. Un artista con la cabeza en constante ebullición creativa. Reivindicativo y lenguaraz, antitaurino pero amante de los encierros, admirado por muchos y respetado por todos, El Drogas ofrecerá un resumen de su dilatada trayectoria: una vida entera dedicada al oficio del rock’n’roll.