Cristóbal Sánchez González descansaba este miércoles en una habitación de la planta de traumatología del Hospital Universitario de Navarra.

Dos amigos le acompañaban: José Francisco, conocido como Rojo, e Ismael, Chupi. Ambos se han preocupado minutos después de concluir el encierro, cuando Cristóbal no ha llegado al bar habitual en el que suelen quedar tras la carrera. “Algo ha ocurrido”, han pensado y se han dirigido a urgencias.

Por el quirófano

En eso momentos, su amigo Cristóbal se encontraba en el quirófano para que el equipo médico limpiara y explorara la herida por asta que había recibido en su pierna derecha. “Recuerdo perfectamente cómo ha sido. El toro me ha tirado con la cara arriba y me ha pillado. He notado un pinchazo y he sabido desde el primer momento que me había corneado”, ha contado este joven de 25 años.

Oriundo de Canara de la pedanía de Cehegín, en Murcia, lleva seis años acudiendo a los Sanfermines. “Mi intención era correr los ocho encierros, pero los planes se han truncado”, ha expresado desde el hospital, en el que tendrá que pasar unos días.

Siempre en el mismo sitio

Nunca antes había recibido una herida por asta. “Ha sido pequeña”, ha añadido, pero sí ha sufrido en otras ocasiones “porrazos o contusiones”.

Cristóbal ha confesado que siempre corre en el mismo lugar, al final de la calle Estafeta. “No sé ni qué toro me ha corneado”, ha dicho. Al pronunciar estas palabras, ha lanzado unas miradas de complicidad a sus amigos para ver si ellos habían podido averiguar el nombre del astado que le ha empitonado, pero tanto Rojo como Chupi tampoco disponían de esa información. 

Los tres escogen tramos distintos y quedan en el mismo lugar todos los días. Estos Sanfermines habían corrido delante de los toros de Fuente Ymbro, Cebada Gago y Álvaro Núñez. Pero, ya este año la aventura de Cristóbal por Pamplona ha concluido. “Me gusta subir desde Canara, porque encierros como los de aquí, no hay en ningún sitio, vienen los mejores corredores y toros”, especificó.

Los tres amigos, con gran afición por estos animales, pertenecen a la peña taurina de Canara. En Murcia celebran numerosos festejos, por ejemplo, los encierros por vereda, consistentes en el traslado de toros desde el campo a un lugar determinado.

Si Cristóbal suma seis años como corredor del encierro, José Francisco ya lleva nueve; en cambio, Ismael se ha estrenado este 2025. El único "pero" que pone el mozo herido a los encierros es que “participa mucha gente, y eso entorpece las carreras”. Su teléfono no ha parado de sonar durante todo el día, entre llamadas y mensajes, y ya espera el momento de regresar a Canara para recuperarse en casa.