pamplona. Un equipo de investigadores de la Clínica Universidad de Navarra y el Centro de Investigación Médica Aplicada (CIMA) ha puesto en marcha un ensayo clínico internacional para producir, con plantas de tabaco, nuevas vacunas idiotípicas personalizadas contra el linfoma folicular. El estudio, patrocinado por Bayer, tiene como objetivo valorar la eficacia de las proteínas obtenidas de la planta del tabaco mediante la nueva tecnología con la que se elaboran las vacunas idiotípicas contra este cáncer, que cada año se diagnostica a 5.000 personas mayores de 40 años en el Estado.

El nuevo procedimiento desarrollado por la farmacéutica alemana consigue acortar el plazo de obtención de estas vacunas de nueve meses a tan solo seis semanas. Las vacunas idiotípicas están elaboradas con las células tumorales del propio paciente que presentan en su superficie una proteína, denominada inmunoglobulina (que tiene una parte específica que es el idiotipo). "Esta proteína de superficie, tras su manipulación, puede usarse como vacuna terapéutica, ya que representa un antígeno (sustancia capaz de estimular el sistema inmune) específico para ese tumor concreto", explicó el director del estudio, Maurizio Bendandi. "Así -dijo- el objetivo de la vacuna es activar el sistema inmune para que reconozca y destruya las células tumorales. Este procedimiento podría ser útil para la mayoría de linfomas no-Hodgkin, no sólo para el linfoma folicular".