pamplona. Nochebuena es el día más demandado y los clientes son más exigentes: aunque no recurren a este servicio para preparar toda la cena, sí lo hacen para asegurarse el plato principal, que muchas veces necesita de mucho tiempo y cuidado en su elaboración, dos cualidades de las que no todo el mundo dispone. Jóvenes, adultos... toda clase de familia demanda este servicio, en el que la atención personalizada es fundamental y los asados, lo más solicitado.
"La clave es la confianza. Que pongan en tus manos la responsabilidad de preparar la cena de Nochebuena, es algo que hay que tomarse en serio" declaró Gerardo Goñi, socio de la empresa Zugarrondo, de Pamplona, también conocida como "la despensa exquisita". Afirmó que existe la falsa idea de que lo cocinado "está reñido" con lo sano, "algo que no es cierto" puesto que en su local, "ningún alimento lleva ninguna clase de aditivo como colorantes, conservantes... y aún así, son productos con una caducidad de más de tres meses. Todo depende del método de cocinado" recalcó Goñi. Pularda rellena de foie y piñones, pintada rellena de manzana, foie y oporto o picatostes rellenos de manzana y naranja (todos ellos a 36 euros el kilo), son algunos ejemplos de la comida semicocinada que se encarga estos días en Zugarrondo, y que sólo necesita ser calentada previamente para estar a punto. Antonio Teruel, cocinero del establecimiento Venta de Urriza, situado también en la capital navarra, afirmó que en Navidad están recibiendo pedidos "de aquellos platos más complicados de preparar en casa". Pato a la naranja o una gran variedad de puddings y hojaldres son algunos de las opciones entre las que se puede escoger.
el favorito Pero el rey indiscutible no deja de ser el asado. Cordero, gorrín y pollo son las carnes más demandadas. Especialmente el gorrín, ya que su precio es menor que el del cordero (una pieza de gorrín asado cuesta alrededor de 90 euros, mientras que el cordero ronda los 115 euros). Diego Figueroa, encargado del restaurante Comanda Café, indicó que "no se suele encargar toda la cena, pero sí lo más complicado o más engorroso de preparar". Su establecimiento está especializado en la venta de comida preparada por raciones, y de cara a Navidad, han renovado el menú. Entre otras cosas, se pueden encontrar raciones de paletilla de cordero asada (9,90 euros), crema de marisco (3,90 euros) o ensaladillas. Aunque también sirven asados de gorrín, pollo y cordero. Blanca Huarte, del restaurante Horno Artesano de Pamplona, también especializado en la venta de comida por raciones, indicó que disponen de una carta con entrantes, primeros platos, cremas, ensaladas, guarniciones, bandejas de ibéricos, fiambres... "Casi nadie encarga toda la comida, sino que piden un primero, un segundo... para ahorrarse trabajo", señaló. En este local disponen de servicio a domicilio, por lo que platos como la pularda rellena de castañas y frutas, al que Blanca considera "la estrella" de estas Navidades, llega a las casas de los clientes listo para servir, y comer.
El Panadero de Eugui, situado en Huarte, ofrece al cliente la posibilidad de llevar la carne. Pero la mayoría se decanta por uno de sus menús: para un grupo de 12 personas se dispondrá de un cordero asado, ensalada mixta, 76 unidades de fritos variados y un postre de leche frita por 185 euros (15,4 euros por persona). La empresa Catering 100x100 Selección, situada en Cascante, no abre el primer fin de semana de Navidad, pero todos los años se agotan los pedidos para Nochevieja y Reyes. "Hay muchos pedidos" indicó Ramón Garces, gerente de la empresa, "tenemos un tope de 300 o 400 pedidos, y se llena todos los años". El servicio es a domicilio, y reciben encargos de toda la Ribera. Para Ramón, la comodidad es el principal motivo de encargo: "Se llegan a juntar 25 o 30 personas de cada familia o cuadrilla, por lo que si piden la cena, sólo tienen que poner la mesa y listo". Esther Osa, trabajadora en el restaurante "Mamá nos da de comer", de Pamplona, apuntó que "los pedidos suelen ser de última hora", opinión que comparten los otros restaurantes. En su caso, predominan los "encargos más familiares", que se realizan al gusto del cliente: "Nos dicen qué quieren, y según lo que nos pidan, les proporcionamos un presupuesto y les aconsejamos posibles cambios", añadió.
Una ayuda para todos aquellos que la falta de tiempo o la "poca mano" con la cocina les suponga un impedimento para sorprender a los suyos con una buena comida.