Pamplona. El siniestro se produjo al colisionar la cesta de otro aparato contra la bolsa de aire del accidentado, y causó la muerte de dos brasileñas y heridas a una veintena, entre ellas las navarras, con fracturas en sus extremidades inferiores, siendo la más grave Aguedi Oyaga Aristu, de 73 años, con ambas piernas rotas, mientras que Verónica Borda Apesteguía, de 35, y su madre, Irene Apesteguía, de 64, sufrieron la rotura de un tobillo y una pierna, respectivamente.
La colisión se produjo en torno a las 06.00 hora local, cuando varias decenas de globos aerostáticos iniciaban el ascenso para realizar una visita aérea de la región de Capadocia, una zona turística de Turquía donde este tipo de excursiones son muy habituales. Por causas que se desconocen, la cesta de uno de los aparatos golpeó y rasgó la tela del globo accidentado, lo que provocó el escape de gas y la consiguiente caída en picado. El piloto de la nave, de nacionalidad española, controló y consiguió aminorar el impacto cuando se encontraban a 50 metros del suelo, pero no logró evitar el choque, según informaron medios turcos.
Dos turistas brasileñas fallecieron, mientras que otros 23 resultaron heridos con fracturas de diversa consideración, entre ellos dos personas con rotura de la columna vertebral. En el globo viajaban diez españoles, diez brasileños, tres argentinos y un puertorriqueño, además del piloto.
Agazapados Los ocupantes de la cesta, ante el inminente impacto contra el suelo, permanecieron agazapados en el fondo para intentar amortiguar los efectos de la fuerte colisión. "De repente ha empezado a quemarse la parte de arriba un poquito y hemos empezado a descender bruscamente mientras estábamos agachados y agarrados en la cesta", recordaba ayer la pamplonesa Verónica Borda, empleada de la tienda El Camerino, de Pamplona, en Antena 3.
El impacto fue tan brusco que llegó a perder la noción de lo que ocurría y explicó que, tras el choque, recuerda encontrarse tirada en el suelo y, poco después, en la ambulancia. Fue trasladada a un hospital de la ciudad de Nevsehir, donde fue atendida por la fractura de un tobillo y una posible afección cervical. Al mismo centro sanitario fue trasladada su madre Irene Apesteguía con una fractura en una pierna.
La navarra con heridas de mayor gravedad fue su amiga Aguedi Oyaga Aristu, operada de urgencia en el hospital Caisiri al haberse fracturado las dos piernas. Tras la intervención quedó ingresada en la Unidad de Cuidados Intensivos del centro. Miembros de la embajada acudirán hoy a los hospitales para valorar el estado de los heridos y agilizar los trámites necesarios para el regreso, que en un principio estaba previsto para el domingo.
Incomunicadas El caos del accidente y la urgencia del traslado a los hospitales motivaron que las turistas perdieran sus enseres personales, entre los que se encontraban sus teléfonos móviles. Durante todo el día de ayer, sus familiares intentaron ponerse en contacto con ellas desde Pamplona para conocer su estado y, en el mejor de los casos, intercambiar tan sólo una palabras.
Jesús Borda, padre y esposo de Verónica e Irene, sólo pudo hablar con su mujer "un par de minutos" llamando al hospital. "Es difícil comunicarse porque han perdido los teléfonos y, además, ha tenido que colgar porque una enfermera se la llevaba a hacer pruebas. No sé nada más", comentó por la tarde.
Una situación muy similar a la que vivió Marisol Oyaga, quien pasó las horas en vilo a la espera de recibir noticias de su hermana Aguedi. "No sabemos nada, nos hemos enterado por los medios. He llamado a la embajada a ver qué me decían y me han contado que le han operado, pero que está bien. Mañana irá un diplomático al hospital e intentará ponernos en contacto con ella", explicó. "Tenemos el número del hospital y estoy esperando a que vengan mis sobrinos, que hablan inglés, para que intenten contactar con el centro, a ver si hablamos con ella", añadió preocupada. Las tres mujeres, según sus familiares, realizaban viajes juntas. "Mi hermana es muy aventurera y ha conocido medio mundo. Le gusta probar todo lo que hay en un país: montarse en elefante, comer cosas raras, subirse en globo... Es muy montañera y valiente, pero ahora está allá sola, en el hospital, y sólo queremos que vuelva cuanto antes", puntualizó Marisol Oyaga.
