PAMPLONA. Según un documento de análisis del sindicato sobre este asunto, los hospitales navarros tienen además un menor índice de eficiencia al ser el tiempo de ocupación más largo también, lo que revela que el SNS-O es "una organización que, en manos de los gestores de UPN, ha ido involucionando en estas dos últimas décadas".
"Pero esta involución ha tenido más responsables que los gestores de UPN, si tenemos en cuenta que mucho de lo que se ha recortado y privatizado en sanidad a contado con el beneplácito y colaboración del PSN", destaca el sindicato en un comunicado.
En el Complejo Hospitalario de Navarra B, señala LAB, se han cerrado 18 camas en Tercera General corta estancia, 14 en Cuarta General y 15 en Tercera Maternal y, en el CHN A, se han cerrado los pabellones N-1 (entero) y H-3 (al 50 %), lo que supone entre 40 y 50 camas.
Además, en el Hospital García Orcoyen de Estella se han cerrado cinco camas de hospitalización domiciliaria y 14 de Planta de Cirugía, y en el Reina Sofía de Tudela se han cerrado 28 camas de Segunda Planta de Control de Cirugía, 16 de Tercera Planta General y 9 de hospitalización domiciliaria.
Para LAB, el cierre de camas hospitalarias en verano "supone un problema estacional sobre uno estructural, como es la ya endémica carencia de camas en la red sanitaria pública, mantenida así por unos gestores que optan por motivos políticos, no técnicos, por derivar y concertar con la red privada".