MADRID. El juez de la Audiencia Nacional Juan Pablo González ha acordado prisión provisional para José Manuel R.M. y Pilar O.S. como presuntos responsables de una organización que habría cometido una estafa piramidal de más de 28 millones de euros con aproximadamente 50.000 víctimas de todo el mundo.

En sendos autos el magistrado acuerda prisión provisional comunicada y sin fianza para ambos por presuntos delitos de estafa, integración en organización criminal y blanqueo de capitales.

En sus resoluciones el instructor fundamenta que de las investigaciones realizadas hasta el momento se desprenden indicios de la comisión de estafas masivas mediante las conocidas como empresas piramidales.

Explica que la base de la estafa piramidal fue la creación de una empresa sobre la que giraba todo el entramado, Union Business Online LTD, registrada en Kingstwon (San Vicente de Granadinas), matriz de otras filiales, entre ellas una con domicilio social en Rincón de la Victoria (Málaga).

Añade que su principal actividad era la publicidad de una forma de obtención de dinero fácil como particular filosofía empresarial y de mercadotecnia para atraer a pequeños inversores con la promesa de multiplicar sus ahorros dedicando solo unos minutos al día, trabajando desde casa, sin desplazamientos y con beneficios inalcanzables en otro trabajo.

Relata que la estafa se basaba en un sistema de mercadotecnia dirigido a los clientes que quisieran formar parte de la red Unetenet, nombre genérico atribuido a Union Business Online, domiciliada en Rincón de la Victoria.

El juez destaca que los clientes pasaban a ser víctimas y que los estafadores se dirigían especialmente "a todas aquellas personas que buscaban alguna fuente de ingreso o trabajo a través de internet".

Los estafadores comenzaron en agosto de 2012 a intentar convencer "a la masa" de "socios/víctimas", a través de actos como charlas, "de los beneficios que les aportaría los servicios de Unetenet, que conseguirían previa compra de una serie de paquetes que les daría pie a ofrecer la publicidad" de la empresa y "empezar a generar ingresos".

Aseguraban a sus víctimas que "a través de un 'back office' particular cada uno tendría acceso a la zona privada de Unetenet para comprobar el estado de los anuncios puestos y las ganancias conseguidas".

"Las ganancias conseguidas irían en proporción directa al paquete contratado y por el que previamente la víctima debía desembolsar su dinero, presentándose Unetenet como una empresa de servicios en la que por una inversión de 18.000 dólares americanos se podía llegar a unos beneficios de 67.600 en 48 pagas semanales de 1.300, si bien debían abonar mensualmente 59,95", explica el auto.

Agrega que para aumentar sus ingresos a los clientes/víctimas se les ofrecía la posibilidad de hacer partícipes de Unetenet a conocidos, amigos y familiares, para conseguir un porcentaje de los beneficios generados a su vez por todos aquellos que por mediación o captación previa entraran a formar parte" de la empresa.

En 2014 decidieron abonar los "presuntos beneficios" con una moneda virtual inventada, denominada "Unetecoin" o "Unete", para que las víctimas se encargaran de captar a nuevos clientes para venderles dicha moneda ficticia al precio que estimaran conveniente y así recuperar la inversión inicial, relata el instructor.

Destaca que hicieron realizar a las víctimas ingresos en cuentas bancarias de distintos países, muchos paraísos fiscales.