madrid - Los últimos incidentes en Zaragoza, Paterna (Valencia) o Badajoz, donde ciudadanos vestidos de payasos diabólicos han realizado bromas de mal gusto o asustado a los viandantes, ha motivado que la Policía anime este Halloween a no ponerse este disfraz.
“Sé más original. El disfraz de payaso diabólico está muy visto”, es uno de los cinco “trucos” que la Policía Nacional lanza estos días para disfrutar de las fiestas de Halloween de forma segura, después de que en las últimas semanas haya llegado a España procedente de EEUU la moda de utilizar el aspecto de un payaso para asustar e, incluso, cometer delitos.
De hecho y tras varias llamadas durante el día de ayer, la Policía tomó declaración en Badajoz a un joven de 19 años por elaborar y publicar en las redes sociales dos fotomontajes con la imagen de un “payaso diabólico”, en lo que se considera como “el origen de la alarma social creada en la ciudad”.
La Policía cree que estas imágenes, junto a otros falsos bulos publicados posteriormente en las redes sociales, influyeron en la persona que, disfrazada de payaso, agredió supuestamente a un joven el pasado lunes en la ciudad.
Y aunque los agentes no dudan de la veracidad del testimonio del agredido, son conscientes de que parece que ahora “todo el mundo ve payasos”, en palabras del jefe de la Brigada Provincial de Seguridad Ciudadana de Badajoz, Aurelio Fernández.
Hasta tal punto llega la “alarma social” que la Policía ha recibido llamadas de gente que pensaba que había visto un payaso en su bañera o de un ciudadano que confundió dos grandes globos de un cumpleaños con dos payasos diabólicos.
Debido a esta alerta y, sobre todo, por la proximidad de la celebración de Halloween el próximo lunes, la Policía ha pedido no compartir ni difundir publicaciones y a llamar al 091 si se sufre una situación de peligro.
Junto con el “truco” de no disfrazarse de payaso diabólico, los agentes de redes sociales también recomiendan que los más pequeños pidan chucherías con el famoso “truco o trato” siempre acompañados o que nunca se suban a coches ni entren en casas de desconocidos. - Efe