El visón europeo ocupa todo tipo de ambientes acuáticos y los ríos navarros tienen mucho potencial para su preservación, pero en ciertos tramos apenas cuenta con vegetación de ribera y lugares apropiados para que esta especie, además de nutrias y turones, puedan refugiarse y, especialmente, criar.
Para facilitar su conservación, Medio Ambiente eliminó a lo largo de este otoño ocho puntos negros de mortalidad del visón europeo y otras especies amenazadas en la Comarca de Pamplona. También restauró tres zonas y creó siete refugios para favorecer la cría de estos mamíferos en el tramo bajo del río Ega, cinco en San Adrián y dos en Azagra. Los trabajos, coordinados por la empresa pública Gestión Ambiental de Navarra, los desarrollaron nueve personas en riesgo de exclusión social de las empresas Elkarkide y Josenea y contaron con un presupuesto total 75.000 euros.
Cabe recordar que el visón europeo (Mustela lutreola), catalogado como especie en peligro de extinción, ha desaparecido de la mayor parte de Europa y en la Península Ibérica está presente en Navarra, La Rioja, País Vasco, Burgos, Soria y Aragón. Más de la mitad de esa población, en torno a 500 individuos, habita en la Comunidad Foral.
Las obras se encaminan a la permeabilización de obstáculos como canales, puentes o acequias que actualmente no se encuentran en condiciones idóneas para el paso de fauna, de manera que los ejemplares salen de los cauces y cruzan las carreteras, momento en el que son víctimas de atropello. Con esta actuación se intenta disminuir la mortalidad directa por esta causa, mejorar la conexión ecológica de los espacios protegidos, incrementando así la probabilidad de conservación de estos mamíferos.
La zona de actuación ha destacado en los últimos años como lugar de incidencia elevada de mortandad de mamíferos. Así, por ejemplo, en las carreteras NA-150, NA-700 y A-15 se recogieron varios ejemplares tanto de visón europeo y como de nutrias, turones, tejones, martas y gato montés.
Las actuaciones se desarrollaron en los espacios donde estos animales campan y se alimentan. Se trata de cursos de agua, naturales y acequias, que pueden constituir un hábitat adecuado estas especies. Además de constituir un hábitat en sí, estas corrientes funcionan también como corredores ecológicos, permitiendo el intercambio de ejemplares e incrementando las posibilidades de conservación de poblaciones pequeñas y aisladas.
Según el personal técnico de Gestión Ambiental de Navarra, “el intercambio genético es vital para la conservación de especies amenazadas a medio y largo plazo, por lo que el hecho de mejorar la segura transitabilidad de los ejemplares puede incrementar el área de influencia y la supervivencia de la especie”. Los trabajos consistieron en la creación de pasos de fauna secos y elevados en forma de pasarela de madera, colocación de gaviones flexibles rellenos de cantos para dar continuidad a algunas orillas y mejora de cierre en la autovía para evitar el paso de fauna de pequeño tamaño.
Además, se desbrozaron los bordes de accesos a la estructuras de paso para que sean más francas y se adecuó la ladera para una buena evacuación del agua de lluvia mediante relleno de talud y acondicionamiento de canaleta, así como su revegetación mediante estaquillado de sauce. En el marco del mismo proyecto, a lo largo de los últimos meses se crearon siete refugios para el visón europeo, nutria y turón, en el tramo bajo del río Ega, en San Adrián y Azagra.