pamplona - Alumnado navarro con una beca que estudia en la Universidad de Navarra (UN), y sus familias, comparecieron ayer en la comisión de Educación del Parlamento para criticar la nueva convocatoria de becas para este curso, que prioriza el acceso a la Universidad Pública de Navarra (UPNA) y reduce las cuantías del alumnado que acude a la UN. Los estudiantes pidieron al Gobierno foral que dé “una solución” para las rentas bajas y medias afectadas por estos cambios y recordaron que hay quien estudia en la UN porque no se ofrecen sus grados en la Pública (la UN tiene 43 grados simples y dobles que no hay en la UPNA). Los grupos parlamentarios del cuatripartito, por su parte, se reafirmaron en los pasos dados, aunque desde el departamento foral de Educación adelantaron que pueden estudiarse cambios en el tramo de renta más bajo. La oposición criticó la nueva convocatoria.

Y, mientras, la asociación que incluye a padres y madres de alumnos, llamada Educación, Esfuerzo y Excelencia (3E), anunció que presentará un recurso ante el Contencioso-Administrativo del Tribunal Superior de Justicia de Navarra por este tema.

El cambio en las becas, defendido por el cuatripartito y cuestionado por UPN, PSN y PPN, incluye diversas novedades. El Gobierno defendió que se llegaría a más estudiantes y que aumentan las becas de comedor, transporte y residencia; pero, también, se reducen los multiplicadores con los que se obtienen las becas de la UN. A su alumnado se le exigía, además, haber optado antes a entrar en la UPNA si ambas ofrecen los mismos estudios. Esta última exigencia se reconoció como extemporánea, porque se pide con el curso ya empezado y hay alumnado que no podría cumplirla, por lo que el Ejecutivo anunció que este año no se pedirá.

Los estudiantes insistieron ayer en que estos cambios perjudican de forma “muy grave” a las rentas más bajas del alumnado de la UN. Estudiantes de Medicina como Edurne Ruiz, Iranzu Viguria y Roberto López, de Periodismo como Julen Sobejano, o la delegada de los estudiantes, Laura Venzal, criticaron que se hayan cambiado esas condiciones con el curso ya empezado. El presidente de la asociación 3E, Jesús Sánchez Ostiz, calculó que la reducción media es del 66%. Este portavoz defendió que, si se quiere becar a más alumnado, hay que aumentar la cuantía destinada a las becas en lugar de cambiar su distribución.

Estas reivindicaciones dividieron de nuevo al Parlamento. UPN, PSN y PPN criticaron la convocatoria, mientras que Geroa Bai, EH Bildu, Podemos e I-E se reafirmaron en los pasos dados, aunque afirmaron que no se opondrán a que haya una revisión a aquellas familias a las que una reducción puede abocar a dejar los estudios. Desde 3E pidieron que se revise la situación de los tramos 1, 2 y 3.

Preguntados por esta posibilidad, fuentes de Educación anunciaron que se estudiará si estudiantes del tramo 1, el más bajo, podrían solicitar otro tipo de ayudas. Se espera que este paso se concrete a lo largo de este mes. Fuentes de la UN, por su parte, adelantaron que están a la expectativa de cómo se concreta ese paso. - Efe/G.M.

UPN. El parlamentario Alberto Catalán dijo que, si se quería llegar a más alumnado, habría que haber aumentado el dinero para becas.

Geroa Bai. Isabel Aramburu defendió que con dinero público hay que priorizar la educación pública, y que la anterior convocatoria inducía a estudiar en la UN.

EH Bildu. Miren Aranoa afirmó que la UPNA debería contar con más grados, como Medicina.

Podemos. Tere Sáez apoyó que se apueste por la educación pública. Auguró que, si hay casos en los que hay un perjuicio, se revisarán.

PSN. Carlos Gimeno lamentó que, con este cambio, el Gobierno ha reconocido que perjudica a ciudadanos. Y que se penaliza según dónde se estudia

PPN. Javier García defendió la libertad de elección de centro y consideró que la nueva convocatoria es “sectaria”.

I-E. José Miguel Nuin respaldó que se priorice la educación pública, pero adelantó que I-E no se opondrá a una revisión de las becas a rentas bajas o medias.