ESQUÍROZ - Un incendio iniciado en la nave de producción destruyó durante la madrugada de ayer la empresa Poliéster Resitex, situada en el Polígono Comarca 2, en Esquíroz (Galar). Los bomberos consiguieron extinguir las llamas ya por la mañana, sin que ninguna persona resultara herida en el suceso.
Aunque será necesario desescombrar para poder evaluar los daños, las primeras valoraciones realizadas ayer suponen que la actividad en la empresa, que se dedica a la fabricación y transformación de poliéster para automoción, vivienda, piscinas o instalaciones renovables, y que emplea en la actualidad a un total de 34 personas, se verá paralizada de forma indefinida ya que las dos naves que la componen quedaron gravemente dañadas. Sus administradores, no obstante, anunciaron ayer mismo su disposición a trasladar la producción a otro lugar lo antes posible.
La Policía Foral se encarga de investigar el incendio, pero la determinación del origen y las causas del fuego también han quedados supeditadas a las labores de desescombro de la fábrica, que se demorarán varios días dada la importancia de los desperfectos registrados, señalaron fuentes de la empresa.
La sala de gestión de emergencias de SOS Navarra fue alertada del incendio sobre las 23.20 horas por los trabajadores de una empresa anexa. Las llamas se iniciaron en la nave de producción, casi siete horas después de que la fábrica hubiera sido cerrada, por lo que no había ningún trabajador en su interior ni ninguna máquina encendida, según aseguraron fuentes de Poliéster Resitex.
gran combustibilidad La gran combustibilidad del poliéster, una resina plástica muy resistente a la humedad y a los productos químicos, provocó que el fuego se extendiera en pocos minutos y que las llamas generasen temperaturas muy elevadas, lo que provocó que tanto las paredes de la fábrica como el techo se hundieran, ya que las estructuras metálicas no resistieron al elevado calor generado por el incendio.
La segunda nave que compone la empresa, dedicada a labores de almacenamiento y logística, no colapsó por completo, pero las instalaciones quedaron igualmente inutilizables. Las medidas de seguridad evitaron que las llamas alcanzase la zona donde se guardan las resinas y otros compuestos químicos en compartimentos estanco.
Hasta el lugar fueron movilizados los bomberos de los parques Central (Cordovilla), Pamplona (Trinitarios), Peralta, Sangüesa y Tafalla, que desplazaron nueve camiones, incluidos los autoescalas y un vehículo de mando, y 25 efectivos, incluidos todos los bomberos de los parques de Cordovilla, Sangüesa y Tafalla, así como el oficial del servicio y dos sargentos, el de Pamplona y el de la zona.
Las características del fuego, por el material combustible y al riesgo de que se desplomasen las naves, impidieron que los bomberos pudieran atacarlo directamente y su labor consistió en evitar que se propagase a las empresas próximas. También se movilizaron agentes de la Policía Foral, que cortaron al tráfico las calles de acceso a la fábrica para evitar situaciones de riesgo y facilitar la tarea de los bomberos. La ambulancia enviada con carácter preventivo no tuvo que intervenir.
Las llamas quedaron extinguidas completamente en torno a las 8.00 horas de la mañana, si bien en el lugar permaneció un retén de bomberos del Parque Central (Cordovilla) para atajar cualquier posible rebrote del fuego, según informaron desde el Gobierno de Navarra.
Asimismo, desde primeras horas de la mañana técnicos de la empresa y de seguros evaluaron los daños causados por el fuego, que se presumen muy cuantiosos. Además de los desperfectos sufridos por las estructuras de la fábrica, también ardieron diversos vehículos, como una carretilla elevadora y una furgoneta.