Muchos navarros llevan soñando con ir a la playa desde que comenzó el estado de alarma por el coronavirus, motivo por el que los donostiarras esperan la llegada de sus vecinos con cierto temor: ignoran si estos esperarán a más adelante para su primer contacto con el mar en la mítica playa de La Concha o si habrá avalancha navarra. Para los que tengan pensado ir a la comunidad limítrofe, la meteorología les será más que afable.

El domingo se espera en la CAV un día de verano para estrenar la nueva estación. Cielos poco nubosos, con algunas nubes altas y también algunos intervalos de nubes bajas, que aumentarán durante la segunda mitad del día en la mitad norte. Es probable que se formen algunas nieblas a primeras horas, pero es improbable que los navarros lleguen a San Sebastián tan temprano.

Las temperaturas no registrarán muchos cambios. En Donostia-San Sebastián oscilarán entre los 13 y los 23ºC. La pleamar tendrá lugar a las 03.27 horas y 15.43 horas, algo a tener en cuenta porque determinará el aforo de la playa si el arenal disminuye. Viento, con predominio de la componente sur, fijándose de componente norte en las horas centrales, originará mar rizada a marejadilla. La mar de fondo del noroeste levantará olas de en torno a medio metro.

En los accesos a La Concha, los visitantes encontrarán hondartzainas, vigilantes que se ocupan de controlar los accesos a la playa y de cambiar los banderines que indicarán en todo momento la capacidad. El banderín verde indica que el acceso no está restringido, que hay aforo disponible; el amarillo que la playa empieza a llenarse o que se acerca la pleamar; y el rojo que el aforo está completo o que es la hora de pleamar, con la recomendación de no hacer uso de la playa dos horas antes y hasta dos horas después de la pleamar.

Las otras playas de la ciudad informarán de su aforo a través de la web del Ayuntamientos, con información de las cámaras que medirán el espacio disponible, o mediante la aplicación para dispositivos móviles (APP) de Diputación, dado que no registran el mismo problema en pleamar que la playa de La Concha.

Además de estos servicios, también se cuenta con el los socorristas en las tres playas de la ciudad y el baño asistido que funcionarán hasta finalizar la temporada oficial el próximo 15 de septiembre. También se han abierto las duchas, con solo dos grifos en funcionamiento para asegurar las distancias, los lavapiés (también con el grifo central cerrado) y los urinarios de las cabinas de las playas.

Están abiertos a todos los usuarios los váteres públicos de la ciudad. Hace unos días se abrieron los autolimpiables y en la actualidad también aquellos que disponen de personal de atención.