El número de respiradores en Navarra creció de los 44 de antes de la pandemia a los 191 con los que se cuenta ahora, cifra a la que se ha llegado tras las diferentes compras y donaciones que tuvieron lugar a lo largo de 2020.
El coordinador ejecutivo de UCI de los hospitales públicos y privados de Navarra, Juan Pedro Tirapu, afirmó que una dinámica “desde hace muchos años” era pedir cada año respiradores, lo que hizo que al inicio de la pandemia “teníamos respiradores para todos los boxes de intensivos prácticamente de toda Navarra”.
Tirapu indicó que Navarra comenzó la pandemia con 44 respiradores que se ampliaron hasta 53, a los que se sumaron 109 a través de un acuerdo del Ministerio de Sanidad con una empresa, y las distintas donaciones de diferentes compañías.
De los 109 fueron adquiridos por Sanidad, 4 se llegaron a utilizar en Tudela y en la Clínica San Miguel, y una parte importante, 38, se repartieron en atención extrahospitalaria. Los demás han servido para renovar distintas áreas.
En total, explicó que, con todo, se han alcanzado 191 respiradores que “vamos a intentar utilizarlos a posteriori” y que “han ayudado a modernizar” unas UCI que ya cuentan todas ellas con uno de estos elementos.
Respecto a la posibilidad de haber realizado una compra a una empresa navarra, Tirapu confesó que “hubo un montón de empresas que se dedicaron a eso”, pero que él estuvo “asesorando” y las conclusiones que sacó es que “es muy difícil en 15 días montar un respirador”.
“Tiene que ser seguro, comfortable y que tenga modalidades que ayudan a retirarlo lo antes posible. Y cumplir las tres era difícil. Estuve con ingenieros que querían hacer un respirador navarro pero era complejo. Estaría muy bien pero es complejo competir en el mercado”, concluyó.
