El Instituto Navarro para la Igualdad, Nafarroako Berdintasunerako Institutua (INAI / NABI) ha llevado a cabo este jueves un encuentro para reflexionar sobre las presiones estéticas a las que están sometidas las mujeres. El encuentro, al que han asistido en torno a un centenar de profesionales con procedencia de distintos campos de estudio diferentes (igualdad, juventud, salud, psicología, ámbito docente, servicios sociales, abogacía, etc.) tiene por objetivo proporcionar las claves que contribuyan a entender este tipo de violencias y cómo detectarlas con el fin de avanzar en la eliminación de la violencia contra las mujeres.

La directora gerente del INAI, Eva Istúriz, ha llevado a cabo la apertura del mismo. En su intervención, ha denunciado estas presiones estéticas, que “favorecen una forma de violencia sexista que coacciona a las mujeres para que adaptemos nuestros cuerpos a un ideal de belleza difícil de lograr”.

Asimismo, Istúriz ha señalado que “la gordofobia es una intersección más en la desigualdad de género, una forma de violencia en la que debemos poner el acento porque las mujeres somos diversas”. Finalmente, ha defendido el rol de las mujeres como “sujetos de transformación social”, abogando por “una sociedad igualitaria, basada en los cuidados y la sostenibilidad de la vida, que anteponga y reconozca a las personas en su diversidad”.

Presión estética hacia las mujeres

La subdirectora del INAI, Mari Cruz Lerga, ha conversado con la filósofa, especialista en género y activista en diversidad corporal, Magdalena Piñeyro sobre los estándares de belleza a los que las mujeres han estado sometidas históricamente, y que a día de hoy se siguen difundiendo principalmente por los medios de comunicación, la publicidad y las redes sociales. “Modelos muy concretos: delgadez, juventud, sin discapacidad, blanco, heterosexual, que una forma de presión y violencia estética que se ejerce contra las mujeres”, tal y como ha señalado la especialista Piñeyro.

Estos cánones, “afectan gravemente la autoestima y salud tanto física como mental de las mujeres” ha denunciado Piñeyro. Los datos de una investigación llevada a cabo por la ONG La Rebelión del Cuerpo (LRC) en 2019 señalan que un 91% de las mujeres encuestadas afirma que la publicidad afecta a cómo percibe su cuerpo; al 80% le gustaría estar más delgada; y un 84% no está a gusto con su cuerpo.

¿Qué es la gordofobia?

En concreto, Magdalena Piñeyro ha abordado el fenómeno de la gordofobia, la discriminación a la que se somete a las personas gordas por el hecho de ser gordas. Esta se basa en estereotipos y prejuicios morales en torno a las personas gordas y sus cuerpos, bajo la “falsa creencia de que el cuerpo aporta información absoluta sobre hábitos y costumbres de salud y alimentación de una persona”, explica Piñeyro.

La activista ha señalado que se trata de una discriminación estructural que limita la vida, los derechos, la salud y el desarrollo pleno de las personas gordas. Y que, si bien afecta tanto a hombres como mujeres, al interseccionar con el género resulta en presiones específicas contra estas últimas, sometidas a los cánones de belleza mencionados previamente. Asimismo, la gordofobia favorece los Trastornos de Conducta Alimentaria tales como la anorexia o la bulimia, entre otros. En este sentido, Piñeyro ha señalado que según la Asociación contra la Anorexia y la Bulimia, el 90% de las personas con TCA son mujeres.; y en un 80% de los casos comienza con una dieta, tal y como apuntan entidades como Cruz Roja e INSALUM, especialistas en salud mental.

Con el fin de frenar este fenómeno, Piñeyro defiende deconstruir el discurso opresivo que conforma la violencia estética, dejando de fomentar la cultura de la dieta, hablando de salud integral y evitando hacer comentarios sobre los cuerpos ajenos.

Finalmente, la jornada ha concluido con la intervención humorística De cuerpo entero de la artista clown Virginia Imaz, en una performance de denuncia contra la violencia simbólica contra las mujeres en los medios, y la invitación a proponiéndonos “habitar nuestros cuerpos con placer y orgullo y cuestionar estereotipos estéticos”. Imaz es obtuvo el Premio Emakunde a la Igualdad.