El colectivo Okupas Motorizados, creado hace cuatro años en Navarra para concienciar sobre el respeto a las plazas de aparcamiento para personas con movilidad reducida, es una iniciativa exitosa que ha comenzado a extenderse por otras regiones españolas con el objetivo de "pescar" a los infractores in fraganti ocupando estos espacios reservados.

Este grupo, creado por el navarro Juan Larreta, diagnosticado en 2007 de esclerosis múltiple progresiva, ha colgado ya en redes sociales unas 30.000 fotografías de vehículos que ocupan estas plazas sin tener la tarjeta que les autoriza a utilizarlas.

La idea ha tenido una gran repercusión en redes sociales y medios de comunicación y se ha comenzado a extender a lugares como Bizkaia o Andalucía, donde hay tres entidades en Huelva, Granada y Dos Hermanas, y en Barajas se ha creado ya otro colectivo.

En Navarra, el grupo ha conseguido una tarjeta única de aparcamiento para personas con movilidad reducida para toda la comunidad, ya que hasta ahora cada ayuntamiento expedía las suyas.

Larreta ha afirmado en una entrevista con EFE que esta nueva tarjeta "seguramente será el hito más importante de la historia de Okupas Motorizados".

El navarro ha destacado asimismo la importancia de la prevista creación de un registro único, que será una base de datos del Departamento de Derechos Sociales con la que se van a controlar todas las tarjetas. "Esto hasta ahora no había y nadie sabía cuántas tarjetas había en Navarra, porque cada municipio tiene las suyas", ha indicado.

Además, ha apuntado, esa base de datos "va a servir a las diferentes policías para poder controlar mejor las tarjetas. Hasta ahora no podían hacerlo, y ahora van a poder acceder a ese registro, con lo cual, a mayor control, menor fraude".

Una vez logrado ese importante objetivo, Okupas Motorizados va a reorientar su actividad. "Nuestro objetivo hace cuatro años era llamar la atención sobre este problema" y "lo hemos conseguido gracias a la cobertura de medios de comunicación, a las redes sociales", ha valorado.

Así, ha subrayado, estos cuatro años "hemos estado con la foto-denuncia diaria de lunes a domingo, de ocho de la mañana a doce de la noche disponibles, y eso al final te acaba cansando un poco y te exige demasiado esfuerzo".

Por ello, ahora han optado "por que la gente continué compartiendo las fotos en redes sociales, pero no desde nuestras cuentas". Se aconseja a quienes publiquen fotos de infractores que sigan la línea de Okupas Motorizados de "tener un lenguaje educado, y tapar matrículas y rostros, si aparecen". "Somos una cuenta que no queríamos criminalizar, sino sensibilizar, y queremos que la ciudadanía siga haciéndolo", ha aseverado.

En los últimos cuatro años, Okupas Motorizados ha conseguido que más de 550 personas envíen fotografías de un uso indebido de plazas de aparcamiento para personas con movilidad reducida y ha captado más de 4.200 seguidores en redes sociales.

Se han publicado en total unas 30.000 fotos de infracciones en Navarra, más de 9.500 en cada red social (Instagram, Facebook y Twitter), además de otras para felicitar a personas por actuaciones concretas o por noticias relacionadas con este tema.

"Creo que ya hemos hecho ese trabajo previo y perderlo ahora sería una pena", ha afirmado Larreta. Por ello, Okupas Motorizados va a seguir presente en redes sociales, aunque "no tan activos como hasta ahora, porque estábamos dedicando muchas horas al día". También acudirán a dar charlas en centros escolares o ayuntamientos cuando se les solicite y participarán en campañas de sensibilización.

"PONTE EN MI LUGAR, NO EN MI SITIO"

En todo caso, sigue tan vigente como el primer día el lema de este colectivo: "Ponte en mi lugar, no en mi sitio".

"Lo único que pedimos a la gente es un poco de empatía, que se ponga en nuestro lugar y que no ocupe esas plazas, que son para lo que son, que es un derecho que tenemos las personas con movilidad reducida que nos facilita la vida", ha resaltado Larreta.

En este sentido, ha afirmado que "la gente que camina con normalidad no necesita esas plazas. Tendríamos que conseguir que esas plazas fueran invisibles a los ojos de estas personas".

"Nadie queremos tener la tarjeta. Yo ojalá no tuviese la tarjeta y pudiese caminar pero, como no puedo hacerlo, para eso están las plazas", ha concluido.