Navarra ha reducido dos grados el umbral de riesgo sanitario por altas temperaturas, de 36 a 34 grados, para adaptar el Plan de prevención del calor a la revisión que ha llevado a cabo el Ministerio de Sanidad tras un verano de 2022 en el que los termómetros de todo el Estado registraron cifras récord. Además, se unifica toda la Comunidad Foral en una misma zona isoclimática y se elimina el umbral de riesgo de temperatura mínima, de manera que solo existirá como indicador la máxima, fijada ahora en 34 grados. 

Así lo expusieron el lunes los expertos de Salud Pública en una reunión que mantuvieron con los departamentos y entidades que componen el gabinete de crisis por altas temperaturas: Salud, Interior, Cultura y Deporte, Turismo, Cruz Roja y la Federación Navarra de Municipios y Concejos. En ese encuentro, los expertos detallaron las novedades que este año va a tener el Plan en Navarra –que se activa cada año del 1 de junio al 15 de septiembre–, en consonancia con los cambios realizados por Sanidad y que afectan a los umbrales y al algoritmo que determina los niveles de riesgo: bajo, medio y alto.

Hasta ahora, en Navarra había dos áreas isoclimáticas: zona norte y zona media, y la zona de la Ribera del Ebro. La primera tenía marcado el umbral de riesgo por altas temperaturas en 36 grados de máxima y 18 de mínima, y la segunda en 36 y 21. Según detallaron a este periódico asistentes a la reunión del gabinete de crisis, el Plan para este verano elimina las temperaturas mínimas y unifica toda la comunidad en una única zona isoclimática. Es decir, el único umbral de riesgo serán los 34 grados de temperatura máxima y lo será para toda Navarra.

El nuevo algoritmo

También se actualiza el sistema para determinar los niveles de riesgo, siguiendo las indicaciones del Ministerio, que ha desarrollado un algoritmo para ello. Así, las alertas por altas temperaturas se activarán cuando la previsión de la temperatura máxima sea superior a la del umbral (34) durante al menos 3 días consecutivos. Cuando ocurra esto, para calcular el nivel de riesgo se sumará la diferencia entre la temperatura máxima prevista y la del umbral para cada uno de esos tres días. Si el resultado es inferior o igual a 3,5, la alerta será amarilla (riesgo bajo); si está entre 3,5 y 7 será naranja (riesgo medio); y si el resultado es superior a 7 se activará la alerta roja (riesgo alto).

Por ejemplo, si la Aemet prevé en Navarra tres jornadas seguidas con temperaturas máximas de 37 grados, se calcula la diferencia cada día: 37-34=3. Se suma el resultado de cada día: 3+3+3=9; y como el resultado es superior a 7 se activará la alerta roja por riesgo alto.

Previsión de un verano caluroso

Este nuevo cálculo y la reducción del umbral de riesgo va hacer que se activen las alertas por calor antes que hasta ahora. Esta revisión, encabezada por el Ministerio de Sanidad, se produce después de un verano de 2022 marcado por las altas temperaturas en todo el Estado, con 11 alertas activadas en Navarra, 114 atenciones por calor y nueve fallecidos por altas temperaturas; y ante la previsión de que en este verano se sucedan también varias olas de calor.

De hecho, Salud Pública señala en su Memoria de 2022, que el verano “especialmente caluroso” del año pasado “con temperaturas máximas y mínimas muy elevadas” provocó “un incremento del número de alertas, de las personas atendidas en Urgencias, de las personas declaradas con patología asociada a las altas temperaturas y un aumento de las personas fallecidas”.

“El cambio climático provoca la alteración de numerosos factores en el medio ambiente, los cuales, a su vez, tienen una gran incidencia en la salud humana. Al ser tan relevante y amplio, se está tratando de abordar el problema desde los diferentes sectores implicados. Por lo que hace necesario seguir trabajando avanzando en el sistema de vigilancia y de información a la población”, recogen los expertos.