Ciencias Universidad de Navarra, reúne este verano a 380 niños y niñas de toda Navarra de entre 3 y 12 años. Pompas de jabón gigantes, una brújula casera, escribir un mensaje secreto con tinta mágica, hacer desaparecer objetos o que cambien de color, son algunos de los experimentos que los escolares realizaron en los campamentos sobre química, en junio y julio. Por otra parte, los campamentos sobre naturaleza se desarrollan al aire libre durante todo el mes de agosto y en ellos los niños conocen la biodiversidad urbana, cómo funcionan los hábitats y por qué es necesario protegerlos. Así, se han dedicado jornadas a conocer diferentes especies de fauna urbana como por ejemplo el murciélago, castor, moluscos, topos, lombrices, aves y cangrejos de río, y mediante juegos, manualidades y explicaciones explorar cuál es su biología, alimentación, hábitat, etc.
En esta edición de Cienceando los participantes también han descubierto la importancia que tienen los insectos, la polinización y los entornos que necesitan para sobrevivir. Los campamentos urbanos del Museo de Ciencias Universidad de Navarra, dirigidos a escolares de Infantil y Primaria, están planteados como una manera divertida de pasar el verano aprendiendo y disfrutando de la ciencia. Su programa de aprendizaje ha sido diseñado por docentes de Química, y por el equipo del Museo de Ciencias, y son impartidos por estudiantes de grado en Ciencias y en Educación y Psicología de la Universidad de Navarra.
