El considerado padre de la Medicina, el griego Hipócrates, dejó escrito allá por el año 377 antes de Cristo lo siguiente: “Todas aquellas partes del cuerpo que tienen una función, si se usan con moderación y se utilizan para el trabajo para el que están hechas, se conservan sanas, bien desarrolladas y envejecen lentamente; pero si no se usan y se dejan holgazanear se convierten en enfermizas, defectuosas en su crecimiento y envejecen antes de hora”. La cita le vino de maravilla al nuevo director general de Salud del Gobierno de Navarra, Antonio López Andrés, para presentar la campaña Muévete/Mugitu, que va precisamente acerca de incrementar la actividad física y reducir el sedentarismo en la población. “Los clásicos griegos ya sabían que la actividad física era básica para la salud”, recordó López Andrés.

Para el departamento de Salud, que va a encabezar junto al consejero Domínguez, esta promoción de la salud pública va a resultar una línea maestra de la legislatura que arranca. Según el director general de Salud, “las patologías relacionadas con el sedentarismo van en alza. No es solo un factor de riesgo sino que es casi una enfermedad. Tengo datos de una publicación de hace tres años. Está relacionado con un 6% de los casos de enfermedad arterial coronaria, con un 7% de casos de diabetes tipo 2, con un 10% de casos de cáncer de mama y de colon y es responsable de hasta un 9% de la mortalidad prematura. El sedentarismo como factor de riesgo, lo consideran la pandemia del siglo XXI”.

Desde el Instituto de Salud Pública y Laboral de Navarra (ISPLN), la directora gerente Marian Nuin afirmó que la práctica de actividad física con regularidad “aporta múltiples beneficios a todas las personas, a cualquier edad, sea cual sea su estado de salud: mantiene la agilidad, mejora el sueño, aporta bienestar emocional y mental, contribuye a mantener el peso adecuado, previene enfermedades, ofrece oportunidades para socializar y favorece la autonomía a todas las personas”. A su vez, la incorporación de estos hábitos “permite contribuir a conservar y proteger el medio ambiente y favorecer la sostenibilidad”. Por otra parte, reducir el sedentarismo “también produce beneficios para la salud”, disminuyendo el riesgo de desarrollar diabetes tipo 2, enfermedades cardiovasculares y algunos tipos de cáncer como el de colon, pulmón o endometrio, y también reduciendo la mortalidad por todas las causas.