El aumento de mamas con implante es, "con diferencia", la cirugía estética que más se realiza en el Estado español en la sanidad privada, según se recoge en el informe 'La realidad de la cirugía estética en España en 2022', presentado este lunes por la Sociedad Española de Cirugía Plástica Reparadora y Estética (SECPRE), que por el contrario señala un descenso de las liposucciones y un incremento de las blefaroplastias.

En relación a la cirugía de la mama, que ocupa el 50 por ciento de las intervenciones totales, se ha incrementado también el número de intervenciones de reducción de pecho, una operación que, si bien en determinados casos cubre el Sistema Nacional de Salud, está encontrando respuesta en el sector privado, ya que los requisitos que considera la seguridad social para aprobar una cirugía de este tipo son "muy duros", según el especialista José María Picó Álvarez. "La sobresaturación del sistema sanitario de salud hace que la consulta de reducción de mamas haya aumentado. Las que pacientes que llevan cuatro años esperando pasa a la privada", ha expresado.

En este ámbito, también el especialista también ha mencionado el "importante" aumento de volumen de trabajo en la cirugía mamaria secundaria, un tipo de intervención que se va a asentar "de manera clara", teniendo en cuenta que "las prótesis mamarias no tienen una duración infinita, y que en los últimos 10 años se han generalizado las revisiones y recambios".

Asimismo, el informe notifica un descenso de las liposucciones y un incremento de las blefaroplastias, hasta llegar a ser el segundo tipo de intervención más demandado. La blefaroplastia (extirpación el exceso de piel de los párpados) es uno de los tipos de intervención, junto con la rinoplastia (corrección de la nariz), que más se ha incrementado con el uso de las mascarillas, ya que el postoperatorio durante la pandemia era "más llevadero, sin tener que dar explicaciones".

Por otro lado, el lifting facial es la intervención que, en opinión de los especialistas, está más en retroceso, por delante de la liposucción. Con relación a esta última, han destacado que, aunque el número de intervenciones ha aumentado, la tendencia es decreciente y menor que años atrás, sobre todo para las de aspiración convencional. Con todo, se espera un aumento con la introducción de las nuevas técnicas y tecnologías en quirófano, tales como el uso de ultrasonidos.

En cuanto a la cirugía corporal, las operaciones más demandadas son la abdominoplastia, el aumento de glúteos, el lifting de brazos, el de muslos y la cirugía genital.   

CIFRAS GLOBALES

El volumen de intervenciones de cirugía estética en el Estado español se ha incrementado un 215 por ciento con respecto al estudio elaborado en 2014, superándose ligeramente durante el año 2021 las 200.000 intervenciones. "La evolución siempre ha sido positiva, con un crecimiento de un 18-20 por ciento anual", ha apostillado Picó.

En cuanto al género, las mujeres acumulan el 85 por ciento de las intervenciones de cirugía estética que se realizan en España, cifra ligeramente inferior a la de 2013. Los varones se han incrementado tres puntos porcentuales con respecto al estudio anterior, describiendo un crecimiento superior y alcanzando el 15 por ciento. Si la intervención más común en ellas es la de mama, en ellos se encuentran la blefaroplastia, rinoplastia y ginecomastia (reducción de senos practicada a los hombres).

En cuanto a la edad, más del 90 por ciento de las intervenciones de cirugía estética se concentran entre los 18 y los 60 años, siendo más minoritarias a partir de los 60 años y sobre todo por debajo de los 18.

Las edades en las que se concentra el mayor número de intervenciones de cirugía estética va de los 18 a los 44 años, siendo el implante de mama la más frecuente, y algo menos, pero con un número también significativo, entre los 45-60 años -la mayoría, blefaroplastias-. Por encima de los 60 y, sobre todo, por debajo de los 18, hay mucho menos volumen de intervenciones de cirugía estética. En concreto, el tipo de intervención más demandado entre los menores de 18 es la otoplastia (corrección de las orejas).

En cuanto a las tendencias de futuro, entre los especialistas hay consenso sobre que cada vez se irán realizando procedimientos "menos invasivos y con más seguridad", según el documento.   

INTRUSISMO LABORAL

Preguntados por el intrusismo laboral, el 82 por ciento de los cirujanos plásticos opina que el intrusismo se ha incrementado en los últimos años y el 18 por ciento considera que se mantiene estable. En cambio, ninguno percibe que haya disminuido.

A tenor de los datos presentados en el informe, la principal evidencia de cierto intrusismo es la frecuencia con que médicos que no superaron a través del MIR la especialidad de cirugía plástica, estética y reparadora, acompañan sus credenciales con supuestas especialidades o másteres que los habilitan como cirujanos estéticos, cirujanos cosméticos u otras designaciones ambiguas, "que confunden a la ciudadanía".