Han pasado más de ocho años desde que Luis Elizalde volvió a nacer. El 27 de marzo de 2015 este vecino de Zizur Mayor sufrió una parada cardiaca y en octubre de 2023 su corazón late con fuerza y puede llevar una vida normal, sin que aquel susto le haya dejado secuelas. Aquel día Luis resucitó, tal y como él relata, y lo hizo gracias a los que se han convertido en sus dos ángeles de la guarda: Javier Cuevas e Iñaki Carranza, policías municipales de Zizur Mayor que acababan de recibir el curso de Soporte Vital Básico, de la mano de la asociación El ABC que salva vidas.

“Soy el fruto del trabajo de otros y que yo esté vivo es el ejemplo de que la formación da sus frutos”, ha relatado este lunes Luis, que se convirtió en el primer superviviente a una parada cardiaca gracias al programa de formación policial en Navarra.

Aunque no recuerda nada de lo ocurrido es capaz de explicar lo que pasó de todas las veces que se lo han contado. Sufrió la parada estando en casa con su mujer, quien junto a una vecina fue la primera en atenderle. Hasta que enseguida llegaron Javier e Iñaki con el desfibrilador y con los conocimientos adquiridos en el curso. Ellos consiguieron mantenerlo con vida hasta que llegaron las asistencias sanitarias. “Yo desperté a los cuatro días en el hospital. No sé cómo ocurrió, pero sé que gracias a ellos puedo seguir viviendo sin secuelas y haciendo una vida normal. Es algo que no todos pueden decir”, sostiene Luis, profesor en el instituto Plaza de la Cruz.

Este lunes ha acudido a la rueda de prensa organizada con motivo del Día Mundial de la Parada Cardiaca acompañado de uno de sus ángeles de la guarda. Javier Cuevas ha reconocido “la gran ilusión” que le producía “ver aquí a Luis, después de haberlo visto tumbado aquel día”. “Habíamos hecho la formación un mes antes y ahí lo pudimos poner en práctica. Era la primera vez, pero salió bien, hasta el médico de Urgencias nos dio las gracias por lo bien que lo habíamos hecho”, ha rememorado Javier.

Aumento de la supervivencia

De hecho, la intervención policial en casos de muerte súbita es sinónimo de supervivencia. Según detallaron ayer en rueda de prensa, el resultado de la introducción de las policías en la atención de la parada cardiaca ha sido estudiado en la tesis doctoral de Clint Jean Louis, miembro de la asociación El ABC que salva vidas. En ella se concluye que la inclusión en la Cadena de Supervivencia de la policía “supone un aumento de la supervivencia, independientemente de la reducción de los tiempos de respuesta”: la participación de la policía obtiene una ganancia en la probabilidad de supervivencia de la parada cardiaca del 10,12%.