La vicepresidenta y consejera de Memoria y Convivencia, Acción Exterior y Euskera, Ana Ollo, y el consejero de Educación Carlos Gimeno se han reunido esta semana con la vicepresidenta de la Subcomisión de Cultura, Diversidad y Patrimonio del Consejo de Europa, María Luz Martínez Seijo, para atender su petición de conocer de primera mano el desarrollo y el abordaje compartido entre ambos departamentos de la memoria histórica en torno al programa ‘Escuelas con memoria’.
Esta iniciativa, según la representante de este organismo europeo, integrado por 45 países, puede ser un referente importante de cara al informe que está preparando en torno a “lugares de recuerdo” para construir una “ciudadanía democrática” desde una óptica pedagógica extensible a otros estados, según ha informado el Gobierno en una nota de prensa.
Luz Martínez Seijo ha acudido a Navarra en calidad de representante institucional de la Asamblea Parlamentaria del Consejo de Europa en la Comisión Europea tras asumir el encargo de liderar, como ponente principal, un amplio informe sobre diferentes experiencias europeas de trabajo educativo desde el punto de vista de la Memoria Histórica. Concretamente, sobre la utilización de la figura de los “lugares de recuerdo” como elemento clave en el sistema educativo que “vaya más allá de la fórmula de los museos”. Esa ha sido la razón por la que ha acudido a la Comunidad Foral, donde ha tenido conocimiento de todos los detalles del programa de ‘Escuelas con Memoria’ así como otras iniciativas impulsadas desde el departamento de Memoria y Convivencia, Acción Exterior y Euskera en colaboración con el de Educación, con el que existe, además, una comisión mixta de direcciones generales.
En el encuentro también tomaron parte los respectivos directores generales de Memoria y Convivencia, Martín Zabalza, y Educación, Gil Sevillano, y los miembros del Instituto de la Memoria, José Miguel Gastón y César Layana. La vicepresidenta Ollo puso en valor la apuesta sostenida en el tiempo desde 2015 y reforzada un contexto actual donde están surgiendo “tendencias negacionistas y de intolerancia”, y la importancia de trabajar con las nuevas generaciones.
“La memoria no es una cuestión de pasado, sino de futuro: solo se puede evitar que se repita aquello que se conoce”, señaló antes de repasar, junto al resto del equipo, tanto el marco legal de las líneas de trabajo en Navarra como los detalles del mismo que pasan por actuaciones que incluyen la educación formal (programa de ‘Escuelas con Memoria’ con Educación), la informal (campamentos de verano con el Instituto Navarro de la Juventud en torno a búnkers, el Cementerio de las botellas, barracones de trabajos forzados…). También la línea universitaria, ya que además de la formación de profesorado existe un máster en la UPNA, que colabora también en este ámbito de la investigación sobre memoria histórica con otras universidades.
Luz Martínez se mostró muy interesada tanto en el planteamiento de esta iniciativa, que, según señaló, es bastante singular en el panorama estatal, como por su carácter colaborativo entre departamentos y también entre centros en red, además de por su renovación pedagógica desde el punto de vista de una “memoria crítica”.
Escuelas con Memoria
Cabe recordar que el programa ‘Escuelas con Memoria’ bascula en torno a cuatro ejes principales: la formación del profesorado; la propuesta de actividades educativas que permiten al alumnado entrar en contacto con lugares y personas vinculadas a la memoria (Botellas de la Libertad, Teatro con Memoria, Imágenes con Memoria, visitas a exhumaciones, así como la puesta a disposición de los centros educativos unidades didácticas); la firma de acuerdos de colaboración con centros escolares para impulsar proyectos de investigación e innovación en torno a la memoria histórica; y la formación y consolidación de una Red de Escuelas con Memoria por la Paz y la Convivencia, en colaboración con el departamento de Educación, según recoge la nota oficial.
‘Escuelas con Memoria’ es un proyecto educativo transversal, que pretende -destaca la nota- convertirse en punto de encuentro del mundo educativo con las políticas públicas de memoria, en especial los lugares de memoria, las exhumaciones y la investigación sobre procesos de vulneración de derechos humanos. En este sentido, quiere aproximar a las generaciones más jóvenes a las aportaciones más relevantes de la historiografía sobre la represión franquista. Pero, también, acercar al alumnado, desde el pensamiento crítico y el compromiso con una educación basada en el respeto a los derechos humanos, a la “larga sombra” que han proyectado aquellos procesos históricos durante décadas y cuyas consecuencias llegan hasta el presente.
Anualmente participan en torno a 10.000 alumnos y alumnas de una treintena larga de centros, y está complementado, dentro del mismo marco colaborativo entre departamentos, por ‘Escuelas por la paz y la convivencia’, que oferta formación, actividades experienciales pedagógicas y talleres participativos que se llevan a cabo en centros educativos. Se ponen a disposición de los centros escolares diversas herramientas formativas y educativas que permiten, tanto al alumnado como al profesorado y las familias, abordar, desde un punto de vista preventivo y educativo, las distintas realidades conflictivas presentes en la convivencia cotidiana. En este caso se trata de una línea que depende de otro servicio de la Dirección de Memoria y Convivencia y que formará en este curso a unos 19.500 alumnos.
En el encuentro no se ha profundizado en esta línea ya que el interés de la representante del Consejo de Europa se centraba en la parte de Memoria Histórica, pero sí ha podido conocer todo el marco legal navarro sobre este ámbito (notablemente pionero en el Estado y con un ejemplo único de la Ley de Lugares de la Memoria) y la amplia trayectoria y red de acciones y recursos del Instituto Navarro de la Memoria, como son el fondo documental, divulgación, acciones de reparación y reconocimiento, etc. Además, pudo conocer que Navarra también ha acogido el primer Congreso de Escuelas con Memoria, que volverá a celebrarse el próximo año, y no descarta –adelantó Luz Martínez- que lo representantes navarros puedan acudir a las instituciones europeas para explicar el programa.
