Si todos los indicadores que se encargan de recabar datos sobre delincuencia y criminalidad apuntan hacia una tendencia creciente, tanto durante el pasado año 2023 como durante el presente ejercicio, la Memoria de la Fiscalía General del Estado, uno de los documentos que mejor permite conocer el alza de ciertos delitos, ha refrendado que en Navarra ha habido un importante crecimiento de varias tipologías delictivas y un mayor número de infracciones penales.
En comparación con el año anterior, el Ministerio Público recibió en 2023 un 4,94% más de procedimientos tramitados bien como diligencias previas, o como urgentes (debido a que pueden terminar celebrándose un juicio rápido). En concreto, se alcanzaron las 29.652 diligencias previas (mientras que el año anterior alcanzaron las 28.256) y en las urgentes llegaron a las 2.770.
Si se desglosa la estadística, los delitos contra la libertad sexual alcanzaron el año pasado las 696 diligencias previas, 98 más que el año anterior, lo que supone un 16,5% más de subida. Las agresiones sexuales alcanzaron los 391 asuntos (debido a la nueva ley de libertad sexual que eliminó el concepto de abuso) por 190 del año anterior y las violaciones alcanzaron las 70 por 15 del ao anterior. Además, llegaron a 87 las agresiones sexuales a menores de 16 años.
Asimismo, los delitos contra la intimidad que tienen que ver con el descubrimiento de secretos (por ejemplo, mandar fotos y vídeos no permitidos de una pareja en actitud sexual o abrir su correo electrónico o postal sin su permiso), son otros de los que más crecen. Hubo 233 diligencias por delitos contra la intimidad por 179 del año anterior.
Por cifras y en cuanto a tipología de delitos, los delitos contra el patrimonio han subido una barbaridad. Llegaron a 8.588 diligencias durante el año 2023 mientras que eran 6.006 el año anterior. Lo que más crecen son los hurtos (hubo hasta 2.159 asuntos) y otros 2.916 procedimientos por estafas, que el año anterior se habían quedado en 1.537.
Otro de los capítulos en las que más ha repuntado la delincuencia son los delitos que son calificados como contra la Administración de Justicia, que se identifican con los quebrantamientos de órdenes de protección y de alejamiento que imponen los juzgados entre los acusados y condenados y las víctimas, la mayoría de los casos por delitos relacionados con la violencia machista.
Dichos delitos contra la Justicia llegaron a suponer la apertura de 1.459 diligencias previas durante el año pasado –los quebrantamientos llegan a ser 1.378 de esos procedimientos– mientras que el año anterior no habían llegado ni siquiera al millar. En total, suponían 502 procedimientos más y porcentualmente la subida alcanzaba el 52%.