El número de personas en riesgo de pobreza y exclusión social en Navarra sigue aumentando, pese a que la Comunidad Foral se mantiene como el segundo territorio del Estado con mejores indicadores, solo superada por la Comunidad Autónoma Vasca (CAV).

Navarra ha sido históricamente uno de los territorios del Estado mejor posicionados en cuanto a indicadores de exclusión y desigualdad, sin embargo, también es la comunidad que más ha incrementado su población en riesgo de pobreza en los últimos quince años: en 2008, año en el que se inició la crisis inmobiliaria, en la Comunidad Foral había 36.000 personas en riesgo de pobreza (5,9%) y el año pasado esa cifra se elevó a más del doble: 93.000 navarros estaban en 2023 en riesgo de pobreza (13,8%).

Son datos que se recogen en el Informe sobre el Estado de la Pobreza 2024, que ha sido elaborado por la Red Europea de Lucha contra la Pobreza y la Exclusión Social en el Estado Español (EAPN-ES) y que ha sido presentado este lunes en el Senado.

Atendiendo a este estudio, Navarra presenta una tasa Arope –que mide el porcentaje de población en riesgo de pobreza y/o exclusión social– del 17,2%, la segunda más baja después de la CAV (15,5%). Pese a que este indicador aumenta un 23,7% con respecto a 2022, la realidad es que la Comunidad Foral presenta tasas notablemente más bajas que la media estatal, que se eleva al 26,5%. Atendiendo únicamente al riesgo de pobreza, la CAV, Madrid y Navarra mantienen las tasas más bajas con un 10,2%, 12,9% y 13,8% de su población en esta situación, respectivamente.

Otro de los indicadores que analiza el informe presentado ayer es el del riesgo de pobreza severa, punto en el que los expertos destacan “la extrema situación de las personas pobres en las comunidades de Navarra, Castilla y León, Asturias y Baleares, donde más del 45% de las personas en riesgo de pobreza están en pobreza severa. De hecho, en la Comunidad Foral más de la mitad de las personas en riesgo de pobreza (93.000) está en una situación de pobreza severa (52.000).

El escudo social

Desde la Red Navarra de Lucha Contra la Pobreza han señalado que “nadie es ajeno a poder encontrarse en una situación de vulnerabilidad” y, respecto al aumento de las tasas, indicaron que ahora los rostros de quienes están en situación de pobreza “son muy diferentes”: “Podemos encontrarnos personas que no perciben ningún tipo de ayuda, personas que reciben la Renta Garantizada, pensionistas o trabajadores que acceden a empleos cuyas condiciones son pésimas”.

Precisamente, el informe que se ha llevado al Senado hace especial hincapié en las prestaciones sociales y subraya que si se eliminasen todas las ayudas y prestaciones, “10,8 millones de personas en todo el país entrarían en situación de pobreza”.

“Pese al aumento del PIB en todas las comunidades autónomas desde 2015, la tasa de pobreza sólo ha descendido en diez de ellas”, recoge el estudio. Asimismo, los expertos denuncian “los efectos de las sucesivas crisis y el encarecimiento de la vida derivado de la inflación y del elevado coste de la vivienda, que han provocado un aumento del riesgo de pobreza o exclusión social en todo el país, que ha pasado del 26% en 2022 al 26,5% en 2023, afectando a 12,7 millones de personas”.

El 28% de las pensiones, bajo umbral de la pobreza

El 28% de las pensiones en Navarra tienen un importe inferior al umbral de la pobreza, un porcentaje notablemente inferior a la media estatal, que se fija en el 36,8%. De hecho, la tasa de pensiones por debajo del umbral de la pobreza de la Comunidad Foral es la segunda más baja del Estado, por detrás de la de la CAV, que es del 24,8%.

Así se recoge en el informe, que también refleja que hay un 14,3% de pensionistas en España de media que cobran una cantidad por debajo del umbral de pobreza severa, situándose en Navarra en el 11,3%.

En todo caso, el informe señala que las pensiones de jubilación cumplen “una importante función reguladora”, no sólo en la calidad de vida de las personas mayores, sino también entre quienes viven con ellas y se ven también beneficiadas. Así, revela que, a nivel estatal, gracias a las prestaciones por jubilación, la pobreza se reduce 5,4 puntos de 0 a 64 años, en “2 millones de personas”, siendo menor el efecto amortiguador en las comunidades autónomas con mayores tasas de pobreza.

Por otra parte, el estudio evidencia la brecha entre el norte y el sur del Estado, con un 33,8% de personas en el sur de España en riesgo de pobreza o exclusión, frente al 20,8% en el norte. “Es evidente la división de España en dos mitades con muy diferentes realidades de vida: las comunidades que se encuentran de Madrid al norte conservan bajas tasas de pobreza o exclusión social –entre 0,8 y 11,5 puntos porcentuales por debajo de la media nacional-–, incluso inferiores a las tasas medias europeas, y, las situadas al sur que mantienen tasas extraordinariamente elevadas --entre 1,5 y 10,9 puntos porcentuales por encima de la media nacional y, en conjunto, superiores a cualquier país de la UE (27)”, indican los autores del informe.