La ganadería Marqués de SAKA de Deba, protagonista en encierros y sueltas de vaquillas en Navarra, se ha visto obligada a sacrificar todas sus reses, un total de 160 cabezas, a causa de la tuberculosis. Según ha comunicado a través de sus redes sociales, no han podido "revertir la incidencia" de la enfermedad y han tenido que "cerrar una etapa" para afrontar "con coraje la situación".

Especializada en reses bravas destinadas al festejo popular, "con un claro rasgo de Casta navarra", la ganadería guipuzcoana ha tenido que tomar esta decisión al detectar un brote de tuberculosis entre sus reses. "Es duro comunicar que, tras tantos años de historia, selección y lucha nos vemos obligados a sacrificar el total de la ganadería", han lamentado.

Honrar la memoria

"Aunque el dolor nos nubla por momentos, no conseguirá apagarnos, tenemos que honrar la memoria de nuestro tesoro, de un trabajo centenario que otros comenzaron, que el aficionado de tantas épocas vivió, que tantos ganaderos ansiaron, que el carácter de un pueblo transformó, y que la historia y el arraigo a esta actividad un día quiso darles el protagonismo absoluto", han añadido, al tiempo que afirman desconocer por el momento cómo afrontarán el futuro.

Asimismo, han querido agradecer a los "ayuntamientos, empresas, comisiones, recortadores, aficionados y en general amigos" que han estado con ellos durante todo este tiempo, sin olvidar a otras ganaderías, ya que la "competencia no está reñida con la amistad".

Como se puede ver en sus publicaciones, acudió a festejos en ferias taurinas de Lodosa, en fiestas de Leitza y en los Sanfermines de Lesaka, en Mendavia, Carcastillo, Murchante y Cárcar, entre otros.