El comienzo de año en cuanto a intervenciones policiales y denuncias vinculadas con el ámbito de la violencia sobre la mujer, ejercida en cualquiera de sus formas, vuelve a arrojar en Navarra números de lo más preocupantes que conviene atajar de algún modo. Así, el recopilatorio que realiza el Instituto Navarro de la Igualdad refleja ya la evolución en la interposición de denuncias durante los dos primeros meses del año. De esta forma, entre enero y febrero se acumulan ya en las distintas policías que actúan en la Comunidad Foral hasta 368 denuncias.

El 46% de ellas, hasta 170 procedimientos, se han incoado por situaciones en las que la víctima ha sufrido tanto violencia física como psíquica. Otras 69 denuncias se han originado por violencia psíquica, lo que supone un 18,75% del total; mientras que otras 86 se interpusieron por maltratadores que habían quebrantado alguna orden de protección (el 23,3%) y hasta un 11,68% se debieron a denuncias de violencia sexual.

Según la prevalencia de edad, resulta preocupante un cierto auge detectado entre las denuncias presentadas por víctimas menores de edad. De hecho, 51 mujeres que no habían cumplido aún 18 años de edad han denunciado violencia en los dos primeros meses del año (el 13,8% del total de las denunciantes), mientras que 22 de esas niñas y adolescentes denunciaron agresiones sexuales. Por tanto, los delitos sexuales cometidos contra menores de edad suponen el 51,16% de las denuncias que se presentan en torno a esta violencia.

Por edades

Ahondando en la horquilla de edad de las víctimas, resulta que en caso de que se tome como referencia aquellas mujeres que tienen menos de 30 años, las cifras arrojan que se han presentado hasta 134 denuncias por víctimas que no habían alcanzado dicha edad, hasta el 36% del total. En el caso de la violencia sexual ese porcentaje es mucho mayor. 32 de las denunciantes de agresiones sexuales (las 22 menores citadas y otras 10 entre 18 y 29 años) no habían cumplido aún 30 años, por lo que aglutinan el 74% de las denuncias sexuales que se han presentado este año en la Comunidad Foral.

En el caso de los agresores, hay 13 que son menores de edad. En cuanto a ellos, en 111 casos de las denuncias el agresor era la pareja actual de la víctima; en otros 164 era la expareja, en 37 era familiar, en 16 casos había otra relación y en 39 no había ninguna relación.